El hielo y la nieve en la región ártica se están derritiendo más rápidamente de lo que se suponía y ello podría elevar el nivel medio global del mar en hasta metro y medio durante este siglo, según una nueva evaluación del cambio climático.
El informe del Programa Internacional de Vigilancia y Evaluación Artica (AMAP) es uno de los más completos sobre el cambio climático en el Ártico y actualiza una evaluación similar de 2005.
El informe completo será entregado la semana próxima a los cancilleres de las ocho naciones árticas. The Associated Press consiguió el martes un resumen ejecutivo que incluye las conclusiones principales.
Según el informe, las temperaturas en el Ártico en los últimos seis años fueron las más elevadas desde que empezaron a medirse en 1880 y que se empiezan a sentir los mecanismos que aceleran el calentamiento climático.
Los cálculos también superan algunos de los pronósticos formulados en 2007 por un panel de expertos de Naciones Unidas sobre el cambio climático.
La capa de hielo en el Océano Ártico, por ejemplo, disminuye más rápidamente de lo que había proyectado el panel de la ONU. El nivel de la capa de hielo en el verano ha estado en o cerca de los récords mínimos cada año desde el 2001, dijo AMAP, que pronosticó que ese océano estará prácticamente libre de hielo en el verano de aquí a un lapso de 30 a 40 años.
AMAP agrega que el panel de la ONU fue demasiado conservador al calcular cuánto se elevará el nivel de los mares, uno de los aspectos más vigilados del calentamiento global debido a su impacto potencialmente catastrófico sobre ciudades costeras y naciones insulares.
El derretido de los glaciares y capas de hielo del Ártico, incluso la masiva capa de Groenlandia, contribuirían a elevar los niveles del mar de 90 a 160 centímetros para 2100, dijo AMAP, aunque notó que el cálculo tenía un alto grado de incertidumbre.
Esas cifras se comparan con una proyección en 2007 de 19 a 59 centímetros del panel de la ONU.
«Los cambios observados en el mar helado en el Océano Ártico, en la masa de hielo de Groenlandia y en las capas y glaciares del Ártico en los últimos 10 años son notables y representan una desviación evidente de las pautas a largo plazo», dice AMAP en el resumen.
La principal función de la organización es asesorar a las naciones que bordean el Ártico: Estados Unidos, Canadá, Rusia, Dinamarca, Noruega, Suecia, Islandia y Finlandia sobre las amenazas al ambiente ártico.Las conclusiones del invierno serán debatidas en una conferencia que comienza el miércoles en Copenhague.
Agencia El Universal