La pintora y escultora mexicana de origen inglés, Leonora Carrington, falleció en el Distrito federal a los 94 años, confirmaron hoy fuentes del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) .
Portavoces del organismo dijeron que la artista falleció ayer a las 22:00 horas de una neumonía cuando estaba ingresada en el Hospital Inglés.
En su cuenta de Twitter, el Conaculta también informó sobre el deceso.
Leonora Carrington, había nacido en 1917 en Chorley (Reino Unido) y se consideraba la única sobreviviente del movimiento surrealista.
Carrington vivió desde los años cuarenta en México, país donde residía alejada de los reflectores y que convirtió en su hogar.
Consuelo Sáizar, presidenta del Conaculta, organismo con funciones de ministerio de Cultura en México, envió el pésame a la familia de la artista a través de Twitter.
En vida Carrington fue pareja del pintor surrealista Max Ernst (1891-1976) y con él viajaría a París, donde congenió con artistas clave del movimiento surrealista como Salvador Dalí, Marcel Duchamp, André Breton y Pablo Picasso.
Carrington recaló en España y en 1940 huyó de ese país donde, en medio de una enorme tensión, sufre un colapso y, por órdenes de su familia, es ingresada en un manicomio en Santander antes de viajar a Estados Unidos.
Algunos cuadros destacados de la artista fueron La giganta, Quería ser pájaro, Laberinto, El despertar, Y entonces vi a la hija del Minotauro y El juglar.
Leonora estaba familiarizada desde pequeña con los mitos celtas, muy presentes en sus cuadros y obras de teatro, a los que sumó los mundos mágicos y fantásticos que descubrió en México, un país que tuvo una enorme influencia en su obra por la variedad de culturas indígenas y prehispánicas.
Recientemente la escritora mexicana Elena Poniatowska, que en 2011 escribió Leonora, una novela inspirada en su vida, consideró a Carrington una figura «tan grande» como la de la propia Frida Kahlo.
«Creo que (Carrington) es cada vez más fuerte y que va a ser más fuerte a medida que pase el tiempo. Es, de veras, tan única como lo fue Frida Kahlo en su época, nada más que ella no quiso hacerse pública» , declaró la escritora a la agencia EFE.
Agencia El Universal