Aunque siempre que la veamos esboce una sonrisa de oreja a oreja, Demi Lovato dice no estar completamente recuperada. La actriz y cantante que sufrió una crisis hace seis meses y que estuvo en rehabilitación, le está costando ser nuevamente una persona sana. Nadie dijo que el trabajo de recuperación fuera a ser fácil y rápido, menos con tantos trastornos por resolver, ya que como todos recordarán, no ingresó a un centro con un sólo, además de tener problemas de alimentación, bulimia y anorexia, trabajó en su bipolaridad, la auto mutilación y la depresión.
Demi asegura que todo esto durará por mucho tiempo más, ya que todo esto no surgió de un día para el otro, sino que lo viene arrastrando desde su temprana infancia:
Este es un proceso continuo, y la parte más difícil de estas enfermedades es que son cosas que voy a tener que enfrentar todos los días por el resto de mi vida. Voy a echarlo a perder, y no voy a ser perfecta, pero mientras trato todos los días para conseguir estar mejor y mejor conmigo misma, entonces estoy un paso por delante de donde estaba antes.
Pero Demi dice que seguirá adelante sea como sea, aunque pararse frente a una cámara en estos momentos le resulte mucho más difícil que antes. Y que nunca pensaría renunciar a la música, ya que gracias a esta, ella mantiene su mente positiva: