Un hombre francés con una lesión en los pies transmuta su condición haciendo largas caminatas en las que moldea hermosos patrones geométricos: crop circles de nieve.
Como los crop circles o las Líneas de Nazca, el arte de Simon Beck toma forma visto desde las alturas, conjurando patrones geométricos en la pureza estética de la nieve. Beck traza estos dibujos en los lagos congelados de Savoie, Francia, trabajando largas jornadas de hasta 9 horas para poder imprimir, aunque fugazmente, estos diseños en la relumbrante superficie nívea.
La contigencia sobre la cual se erigen estos patrones geométricos –que evocan ciertamente los famosos círculos en los cultivos– los hace aún más atractivos: su duración depende estrictamente de la veleidad del clima. Beck diseña y resideña las figuras cada nueva nevada, a veces sin lograr completar la obra debido a las acumulaciones de cada noche. Y en otras ocasiones una de sus hermosas obras puede desaparecer en segundos cuando se precipita una avalancha.
El artista francés realiza un delicado trabajo con sus botas de nieve, necesitando de una cierta consistencia especial en el terreno para registar las formas espirográfica y reminiscentes de algunos mandalas orientales (en algunos casos podríamos hablar de fractales ya que diseña las formas de copos de nieve con copos de nieve aplastados en un circuito de autorreferencia). Cuando la nieve es demasiado suave Beck llega utilizar palas, pero generalmente sus pies son suficiente.
Curiosamente la motivación original de estas efímeras pero deleitantes obras no es el arte por el arte, sino que Beck empezó a realizar largas caminatas en la nieve luego de que problemas en sus pies le impidieran correr en superficies duras. “Andar sobre la nieve es una forma menos dolorosa de ejercitarme”, dice Beck, quien añade, casi con desden que piensa comprarse una mejor cámara para registrar sus piezas