De su visita a México en 2012, el papa Benedicto XVI se llevó un típico sombrero de charro y unos zapatos que le hicieron especialmente para la ocasión en una fábrica de León, Guanajuato.
Tanto le gustaron esos zapatos de la marca Ackerman que Benedicto decidió que serán los que usará tras su retiro del cargo, que empieza este viernes -según nota de BBC Mundo-