En entrevista que publica este viernes la más reciente edición del semanario local Qué Pasa, Ricardo Lagos dijo: “Debemos legalizar todas las drogas en Chile”, aunque aclaró que “no es llegar y decir ‘chipe libre’ (libertinaje). Hay que regular”.
Colocó como ejemplo que “el alcohol en Estados Unidos se vende, pero a una persona joven siempre le van a pedir el carné (de identidad). Anduve 10 días en Estados Unidos con un nieto de 24 años y en ninguna parte le dejaron de pedir la cédula para tomarse una cerveza”, mencionó.
Lagos puntualizó que “entre los 15 y los 24 años hay que hacer campañas de prevención: no al alcohol, no al tabaco. En cambio, respecto a la droga, no hay una campaña. Hay un castigo, una prohibición”.
“Cuando uno ve que muchos estudios científicos hablan que el alcohol y el tabaco son más dañinos y adictivos que la mariguana uno dice: hay que parar. Incluso más, hay varios que dicen que no hay mayor diferencia entre la mariguana y la cocaína”, comentó.
Varios expresidentes latinoamericanos están de acuerdo respecto que se debería regular y legalizar todas las drogas en la región para bajar el narcotráfico, la criminalidad y la violencia.
De acuerdo con la idea de Lagos para Chile, este país sudamericano debería partir por legalizar la mariguana y, transcurridos dos años y en la medida que sean exitosas las campañas de prevención, vendría la cocaína.
Reveló que en Chile, en 2002, se registraron 10 mil detenciones por tráfico de droga, cifra que 10 años después llegó a 82 mil.
“Llegué a la convicción que la política prohibicionista había fracasado. Uno va teniendo otro tipo de contacto, ve lo que ha pasado en Colombia, México, en Centroamérica. Todo apunta a la necesidad de entender que no es un tema individual de un país”, dijo.
El expresidente chileno planteó que “para el drogadicto que no tiene vuelta, y que es un absoluto dependiente, hay que suministrarle la droga y preocuparse de que la jeringa esté limpia. Así no se producen contagios”.
Lagos subrayó que “cuando usted usa la política del encarcelamiento y la criminalización, lo único que hace es llenar las cárceles con gente. Lo que se va a dejar de gastar en cárcel, hay que gastarlo en prevención, en campañas”.
“A mí me educaron con que la coca era lo peor de lo peor. Entonces diría, partamos por legalizar la mariguana, con lo cual una gran cantidad de delitos desaparece”, comentó.
“Estoy por descriminalizar y eso quiere decir legalizar el consumo, la producción, el transporte y la comercialización de mariguana. Después de uno o dos años veremos si nos atrevemos a legalizar la cocaína”, apuntó el exgobernante.
“Una cosa es decir que quiero legalizar, pero yo no quiero que la juventud chilena sea drogadicta o adicta a la mariguana. Hay un elemento interesante: el fruto prohibido siempre atrae. Si deja de serlo, cambia la forma de hacer campaña”, aclaró.
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