Casa Mila
Más conocida como La Pedrera, este edificio modernista diseñado por Antoni Gaudí es uno de los iconos de Paseo de Gracia y de Barcelona. El encargo provino del matrimonio Pere Milà i Camps, importante empresario textil, y su mujer Roser Segimon i Artells, viuda de un rico indiano.
Fue en 1906, cuando tras aprobar las obras del Eixample, esta zona de la ciudad comenzó a ser edificada por la burguesía catalana. Para su monumental vivienda la pareja escogió a Gaudí, quien entonces ya había diseñado la Casa Batlló. En total, el arquitecto levantó dos inmuebles de seis plantas con dos patios interiores, aunque en la fachada parece un único edificio.
Para su diseño el artista se inspiró en su estilo naturalista, otorgándole formas que asemejan a las olas del mar, balcones con hierro forjado como si fueran plantas trepadoras, rosas esculpidas en la fachada y chimeneas con acabados en forma de cabezas de guerreros.
También cuenta con motivos religiosos, como su cruz de cuatro brazos o esculturas de la Virgen. Su originalidad hizo que haya sido uno de los trabajos más valorados de Gaudí, a pesar de su abandono por las discrepancias con la familia Milà sobre las pinturas interiores. Actualmente, la casa está abierta al público y es una de los edificios más visitados de Barcelona.