OAXACA….SE PRESENTA HOY LA MAJESTUOSA GUELAGUETZA

OAXACA, Oax.-Oaxaca observa con satisfacción un momento de respiro.

El magisterio violento ha desistido de boicotear la Guelaguetza, los preparativos siguen para esa fiesta anual del pueblo y del turismo, y en ese ambiente de distención se buscan nuevas vías de diálogo para terminar con el conflicto.

Esta breve situación se da tras cuatro meses de problemas, de tomas de carreteras, de cierres de calles, de bloqueos a comercios, de saqueos a establecimientos, de robos al transporte público, de desabasto a causa de la violencia de la Sección 22.

De nada han servido las pláticas convocadas desde la Secretaría de Gobernación (Segob), porque la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) tiene solamente exigencias y ninguna cesión.

Pide echar abajo la reforma educativa, mantener el control y la venta de plazas, manejar a discrecion el presupuesto educativo de Oaxaca, la libertad de sus líderes violentos e impunidad para seguir delinquiendo.

En ese ambiente, el arzobispo de la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, José Luis Chávez Botello, felicitó y reconoció la decisión de la Sección 22 del SNTE de desistir en el boicot a la máxima fiesta de los oaxaqueños, ya que abona al bien común.

En su mensaje dominical, el arzobispo dijo que Oaxaca necesita un respiro en medio del conflicto y la violencia, un tiempo de sano esparcimiento para recobrar la confianza y la socialización. Consideró que en este tema “hace falta diálogo, sentarse juntos y ver que es lo que ayuda más”.

“Con oración, con verdad, unidad y bien común hay que afrontar los conflictos, agregó. Las diferencias encontradas que llevan a generar violencia, se tiene que reflexionar; si queremos el bien de la sociedad, la raíz de la fiesta está en el corazón del pueblo”, comentó.

El arzobispo Chávez Botello, puntualizó que más que contraponerse, la llamada Guelaguetza popular, promovida por los maestros con la Guelaguetza llamada oficial, se complementan.

A todos beneficiaría mejorar y fortalecer las diferentes celebraciones de la Guelaguetza que muestren su raíz viva, cristalicen mejor sus costumbres, valores y aspectos propios de cada comunidad y, si es posible, calendarizar su realización en diferentes días para dar oportunidad de participar a todos los que quieran asistir, indicó.

Consideró que la fiesta de la Guelaguetza propicia el encuentro y la comunicación, educa en la convivencia, en la alegría sana y en compartir lo bueno con los demás; “abre a lo bueno, a lo bello y al trascendente por la música, la danza con trajes típicos y atuendos especiales” .

El arzobispo de Oaxaca también se pronunció por evitar que las fiestas se conviertan en un mercado, porque pierden su razón de ser. Me parece bien que se quieran preservar las raíces, pero sin descuidar los frutos, porque de que sirve cuidar una raíz si no hay tronco ni fruto, y éstos son los indígenas de carne y hueso, la belleza de su cultura y el bien común, resaltó Chávez Botello.

INF./TELÉFONO ROJO/QUADRATIN