Castillo de Bran, Rumania.
El más legendario de los castillos es el Bran de Transilvania donde la leyenda afirma que aquí vivió el famoso conde Drácula o al menos fue el lugar donde el escritor Bram Stoker ubicó la historia de este personaje sobrenatural.
Lo cierto es que esta fortaleza data del siglo XII y fue levantada por los Caballeros Teutones; su leyenda negra procede de uno de sus habitantes Vlad Tepes (1436-1442), llamado el Empalador por sus sanguinarios métodos.
En el siglo XX el glamur llegó a la fortaleza de la mano de la reina María quien la eligió como residencia de verano. Hoy se pueden visitar sus dependencias totalmente restauradas.