El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, señaló hoy que la pausa anunciada por Rusia de tres horas de suspensión diaria de los ataques militares para permitir la ayuda humanitaria en Alepo, es insuficiente.
En conferencia de prensa en Ginebra al concluir una reunión con diplomáticos de Estados Unidos y Rusia, los países que presiden el Grupo Internacional de Apoyo a Siria, de Mistura reiteró el llamado de la ONU a una pausa de 48 horas semanales.
“Primero, Naciones Unidas no fue consultada sobre esta medida. Segundo, basados en lo que hemos oído del coordinador humanitario en Damasco, Yacoub El Hillo, tres horas son insuficientes. El siguiente punto: hemos reiterado que es necesitamos, obviamente, mantener 48 horas continuas. Es la única forma viable para que las caravanas con ayuda vital sean posible y efectivas”, subrayó el enviado especial.
Esto permitirá atender las necesidades básicas de alimentos y medicinas de la población en Alepo, consideró de Mistura.
Por otra parte, indicó que continúan las conversaciones con Rusia y que éste país se ha mostrado abierto a consultar con Naciones Unidas para mejorar la propuesta de tres horas del cese de hostilidades para la ayuda humanitaria.
El enviado especial deploró la creciente militarización del conflicto y reiteró que no hay una solución castrense sostenible en Alepo ni en ningún lugar de Siria.
Por su parte, su asesor especial, Jan Egeland, quien acompañó a de Mistura en la conferencia de prensa, explicó que los civiles podrían recibir ayuda sólo si se permite el acceso adecuado de la ONU y de sus socios humanitarios.
“Es desgarrador para miles de trabajadores humanitarios en Siria y sus alrededores no poder ingresar, debido a los enfrentamientos, de ir al rescate de millones de personas. Hay enormes recursos listos y trabajadores humanitarios dispuestos a correr el riesgo de entrar en estas zonas si consiguen el permiso que no tienen en este momento», dijo Egeland.
Otra instancia de la ONU, la Oficina del Alto Comisionado para los Refugiados (ACNUR) urgió a todas las partes del conflicto en Siria a asegurar la seguridad y el respeto a la dignidad de los civiles, incluidas las familias y grupos vulnerables en la ciudad de Alepo, que se encuentran bajo constante bombardeo, violencia y desplazamiento forzoso.
La agencia expresó gran preocupación por la ola de ataques a los asentamientos de desplazados en la gobernación de Idleb, ocurrida en los últimos 10 días, así como otras agresiones contra asentamientos de desplazados y civiles en otras partes de Siria que han resultado en bajas civiles y más desplazamiento.
Los ataques muestran una indiferencia total por la vida de los civiles, apuntó ACNUR, y reiteró la importancia de la seguridad y el respeto por el carácter civil y humanitario de los asentamientos de desplazados.