??Los políticos mexicanos usan las redes sociales (Twitter y Facebook) para atacarse pero no para informar, consideró Diego Beas, autor del libro «La reinvención de la política: Internet y la nueva esfera pública».
El experto (@diegobeas) contestó un cuestionario para EL UNIVERSAL, a propósito del estreno de un nuevo formato en el portal de internet de la Presidencia de la República, donde otra de las novedades es el espacio donde presentan a la esposa del Presidente, Margarita Zavala, como Primera Dama y su biografía.
Articulista de diarios como El País, de España, consideró irrelevante que el presidente Felipe Calderón cuente con casi 600 mil seguidores en su cuenta de Twitter.
– ¿Qué tan importante es para un gobierno el uso de las redes sociales (Twitter, Facebook, entre otras) para comunicarse con sus gobernados?
-Dependiendo cómo se utilicen. Tener un perfil en Facebook, utilizar Twitter o tener una página web no dice ni produce nada en sí mismo. Es decir, la presencia en sí misma en estas plataformas es irrelevante. Hasta ahora el uso más generalizado de estos medios en la clase política responde sobre todo a no querer quedarse atrás. Pero, ni los utilizan adecuadamente ni creen en su potencial como herramientas para establecer formas de comunicación más horizontales y eficaces.
– Si conoce usted el caso del gobierno del presidente Felipe Calderón, ¿qué opinión le merece que en un año el mandatario logró acumular casi 600 mil seguidores en Twitter?
-Me parece completamente irrelevante. La importancia no está en el número de seguidores, sino en la forma en la que se utilizan las herramientas. La clase política en México sólo sabe utilizar Twitter para dos temas: como canal personal de difusión -propaganda, incluso-; y para enviar mensajes a rivales políticos. Los usos menos interesantes y provechosos de la plataforma.
– ¿Puede revertirse hacia un gobierno el uso de las redes sociales?
-Las redes sociales en principio no son ni pro ni contra gubernamentales. Son lo que sus usuarios hagan de ellas. Son vehículos de comunicación muy poderosos cuyo impacto político se determinará completamente en función de las circunstancias. En algunos casos, incluso, las mismas herramientas pueden tener efectos que fortalezcan y debiliten al mismo tiempo a un gobierno o grupo determinado.
– ¿Hasta dónde es privado y hasta dónde es público lo que un funcionario e incluso un presidente de la República escribe en Facebook y Twitter?
– A no ser que un país legisle algo específico en la materia, todo lo publicado en estos medios se asume como público. Tanto por parte de la persona o grupo que lo emite como de todos aquellos receptores que tienen acceso al material.
En marzo de 2010 la Presidencia de la República contrató a la empresa Lunave Multimedios, S.A. de C.V., a un costo de 3 millones de pesos según el contrato ITP-006007-10, para asesorías «en análisis de contenido de opinión pública en las redes sociales».
En agosto de 2010 la oficina de Comunicación Social de la Presidencia, que coordina Alejandra Sota, instruyó a todos los voceros del gobierno federal -de casi 200 dependencias, entre ellas secretarías de Estado- a usar las redes sociales para informar sobre las actividades de gobierno.
En febrero de 2010, luego de la matanza de jóvenes en Villas de Salvarcar, Ciudad Juárez, Chihuahua, el presidente acudió con los afectados y familiares de las víctimas, a quienes había señalado erróneamente como presuntos pandilleros.
Enseguida, abrieron una página de internet www.todossomosjuarez.gob.mx en donde su entonces coordinador de asesores, Antonio Vivanco, hoy director de la Comisión Federal de Electricidad, inauguró una serie de chats ciudadanos, que incluyeron a siete secretarios de Estado, pero culminaron el 22 de julio con escasa atención de la gente.
El más interrogado fue el de Salud, con 34 preguntas, seguido de Abelardo Escobar, de la Reforma Agraria y oriundo de Ciudad Juárez, con 29 preguntas. En un primer chat el entonces secretario de Economía, Gerardo Ruiz Mateos, recibió 21 preguntas, pero en una segunda exposición el 17 de junio se redujo a nueve.
El Presidente es un activo participante de las redes sociales, principalmente Twitter, donde él mismo responde a sus seguidores. Con cuenta desde el 15 de mayo de 2010, el mandatario ya suma 565 mil 372 seguidores y mil 30 tweets.
Aunque la mayoría de los miembros del Gabinete de Calderón ya tenían cuenta en Twitter antes del anuncio del martes, algunos no la usaban, como el secretario de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván, quien ayer felicitó a tropas por el combate a los incendios; el vocero de la narrativa anticrimen, Alejandro Poiré, tampoco usaba su cuenta y ayer presentó su espacio de comunicación en la página de la Presidencia de la República.
Agencia El Universal