Andrés Audiffred…de los caricaturistas más notables del siglo XX

Como parte de los esfuerzos por difundir el legado de uno de los caricaturistas más notables y olvidados del siglo XX, y a propósito del aniversario 120 de su nacimiento, la Dirección General de Publicaciones (DGP) del Conaculta, en coedición con el Museo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis, presentan el libro ¡Así somos! Andrés Audiffred y su México. Caricatura costumbrista mexicana del siglo XX, de Rafael Barajas El Fisgón.

El libro de 223 páginas a color reúne 213 imágenes de obras que forman parte de la exposición del mismo nombre, curada por Rafael Barajas, que fue inaugurada en mayo de 2014 y permanecerá abierta hasta el 26 de enero, en el Museo del Estanquillo. De esta forma se rescata y difunde el trabajo de uno de los caricaturistas más leídos y queridos de México que publicó durante casi cuatro décadas, a partir de 1922 y hasta su muerte ocurrida en 1958, en importantes periódicos, suplementos y revistas.

Audiffred es considerado uno de los pioneros de la historieta mexicana; en su tira Lipe el Chino introdujo a nuestro país el lenguaje del cómic estadounidense y con la saga de El Señor Pestaña, publicada en El Universal, construyó uno de los primeros personajes entrañables de la historieta nacional.

Con su trazo, supo retratar al México posrevolucionario de una manera única a través de la creación de personajes como el peladito de barrio, el tarzán y su changuita, el catrín, el diputado, la María y la borrachita, algunos de los cuales siguen estando vigentes.

Sin embargo, también realizó dibujos sobre política internacional, criticando el fascismo, por ejemplo, en algunas de sus obras se puede ver a Mussolini o a Hitler ridiculizados y en escenas descarnadas pero hilarantes.

Andrés Audiffred juega un papel relevante en la historia de la caricatura de nuestro país, pues se le considera el eslabón que une a José María Villasana, José Guadalupe Posada y Ernesto García El Chango Cabral, con Abel Quezada, Gabriel Vargas y Eduardo del Río Rius, refiere Rafael Barajas en el texto de introducción del libro.

“Era un cronista notable y el conjunto de su obra conforma una vasta crónica gráfica del México posrevolucionario. Carlos Monsiváis, otro gran cronista, siempre entendió la importancia de este dibujante; tanto que algunas de sus crónicas más notables parecen estar inspiradas directamente en los monos de Audiffred (véase por ejemplo el libro De qué se ríe el licenciado, una crónica de los cuarenta).

“El escritor-coleccionista era un ferviente admirador de este monero, al punto que rastreaba y perseguía sus piezas. Gracias a esto, el Museo del Estanquillo posee un buen número de dibujos, goauches, tintas y acuarelas de Audiffred, y este acervo fue lo que permitió reconstruir una porción del universo de su obra. Rescatar el trabajo de este caricaturista, uno de los más notables y olvidados del siglo XX, es un acto de justicia cultural necesario y divertido”, agrega El Fisgón.

Carlos Andrés Audiffred nació en la Ciudad de México el 30 de noviembre de 1895 y todo indica que su padre fue miembro de la comunidad de los barcelonettes, un grupo de inmigrantes del sur de Francia que llegó a México a mediados del siglo XIX a probar fortuna. Por una tarjeta publicitaria hallada entre fotografías del caricaturista, se puede deducir que su padre era C. Audiffred, el dueño de la gran sombrería francesa El Eco de París, que estaba ubicada en el Portal de Mercaderes.

Su primera infancia se enmarca en el contexto de la belle époque porfiriana y es posible que su familia haya tenido una posición medianamente acomodada. El caricaturista Salvador Pruneda afirma que Audiffred mostró desde pequeño un talento natural para dibujar y que conquistaba todos los premios escolares de dibujo.

Sus primeros dibujos conocidos datan de 1919 y acusan una marcada influencia del art-nouveau, como su Pierrot leyendo en un parque, portada del número siete de la revista Policromías. Semanario Humorístico de Estudiantes, o la acuarela de Ana Pavlova – quien visitó México ese mismo año – en la cual muestra a la bailarina de cuerpo entero, en puntas, en una pose afectada y ataviada con un tutú negro. En ambas imágenes deja ver que tiene escuela pues su trazo es firme, suelto, y sus figuras son anatómicamente correctas.

¡Así somos! Andrés Audiffred y su México. Caricatura costumbrista mexicana del siglo XX será presentado este sábado 17 de enero a las 12:30 horas, en la Terraza del Museo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis, en la calle Isabel La Católica No. 26 esquina Madero, Centro Histórico, con los comentarios de Juan Manuel Aurrecoechea y Rafael Barajas El Fisgón. Entrada libre.

La exposición ¡Así somos!… está compuesta por más de 350 piezas entre pintura, dibujo, gráfica, fotografía y escultura, tanto del propio Audiffred como de sus contemporáneos: Luis Hidalgo, Hugo Tilghman, El Chango Cabral, Antonio Arias Bernal, Rafael Freyre, Carlos Mérida, Juan O´Gorman, Rufino Tamayo, José Clemente Orozco y Juan Arthenack, entre otros. También se incluyen piezas de varios de sus predecesores: Claudio Linati, Joaquín Heredia y Posada