Una nueva investigación apunta a que el uso del Botox por los jóvenes puede afectar su desarrollo emocional -según nota de BBC Mundo-.
La investigación, publicada en la revista británica Journal of Aesthetic Nursing, indica que cada vez más menores de 25 años usan inyecciones de Botox para reducir sus arrugas. La práctica podría afectar a su capacidad para expresar emociones.
Los autores dicen que la expresión facial afecta tanto a nuestras emociones como a nuestro esfuerzo por transmitirlas. Por ejemplo, dicen que no solo sonreímos porque estamos alegres, sino para llegar a estarlo.
Los tratamientos con Botox son el tipo de cirugía cosmética más usado en el mundo y han sido usados por famosos como Courtney Cox o Nicole Kidman.