El periodo de sesiones de 2017 de la Comisión de Desarme de las Naciones Unidas, comenzó este lunes con una advertencia sobre el aumento de las tensiones regionales y globales provocadas por una nueva carrera armamentista.
Durante la jornada inaugural, el Secretario General Adjunto y Alto Representante de la ONU para Asuntos de Desarme expresó preocupación por tendencias que abarcan tanto a las armas convencionales como a las nucleares, que amenazan con revertir los avances alcanzados desde que finalizara la Guerra Fría.
Kim won-soo instó a la comunidad internacional a revertir estas situación.
Afirmó que nuevas tecnologías tienen el potencial de influir negativamente en la paz y la seguridad internacionales y que estas abarcan tanto a sistemas de armas de última generación como a otras aplicaciones tecnológicas desarrolladas por el sector privado y el académico.
“Desde la ciberseguridad a la inteligencia artificial, pasando por los cohetes hipersónicos, estas nuevas tecnologías también están provocando que se haga borrosa la línea entre las armas estratégicas y las no estratégicas y la existente entre las nucleares y las convencionales. El abordaje de estas tendencias requiere un enfoque integral”, subrayó.
El funcionario apuntó que la sesión tiene la oportunidad de revitalizar y modernizar el concepto del desarme general y completo.
El órgano fue establecido en 1978 para considerar y hacer recomendaciones sobre varios problemas en el campo del desarme y dar seguimiento a las decisiones relevantes y las recomendaciones a la sesión especial sobre el tema.