Casa Vicens
Fue una de las primeras obras de Antoni Gaudí tras haber terminado la carrera. El encargo le llegó de Manuel Vicens i Montaner, quien deseaba una segunda residencia en Gracia para pasar allí sus vacaciones, pues por aquel entonces, esta villa aún no estaba anexionada a Barcelona.
Las obras comenzaron en 1883 y el autor siguió su estilo inicial, con influencias orientales: mudéjar, persa y bizantino. El resultado fue un edificio cubierto de cerámica que recuerda a las construcciones árabes. De hecho, en sus interiores, uno de los techos se asemeja al Generalife de la Alhambra de Granada.
Gaudí también diseñó su mobiliario y los jardines, aunque estos últimos hoy en día están ocupados por edificios de viviendas. En 2005 la Casa Vicens fue declarada Patrimonio de la Humanidad.