La apuesta del magisterio disidente es simple: el país no aguanta una represión.
“Estamos en una situación muy compleja como para echarle más gasolina al fuego”, resume Pedro Hernández a nombre de la Sección 9.
En entrevista, se declara partidario de revisar la estrategia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) porque, recalca, el paro no puede ser idefinidido.
Pero lleva más de tres meses y el acuerdo es no iniciar el ciclo 2016-2017 el lunes próximo, como han sido exhortados por la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el gobierno en pleno.
“Cuando decimos paro indefinido no quiere decir que para toda la vida. Por eso el mismo lunes tenemos que evaluar el impacto”, asentó.
Según su dicho, el paro será total en Oaxaca, Michoacán, Guerrero y Chiapas, pero en otras entidades la suspensión parcial porque la Coordinadora no tiene control total sobre el magisterio.
Hernández rechaza responsabilidad del grupo violento que comanda los desmanes de la Coordinadora.
Según él, el conflicto fue ocasionado por el gobierno al poner en marcha la reforma educativa y el magisterio inconforme tiene disposciión para resolver el problema.
Toma aire:
“Nosotros estamos poniendo el balón en la cancha de la Secretaría de Gobernación en el sentido de que se reinstalar la mesa si ellos dicen hoy la reinstalamos hay la disposición».
“Esperamos que no haya la tentación de la represión porque yo creo que en el país estamos en una situación muy compleja como para echarle más gasólina al fuego”.
