CRÓNICA POLÍTICA: Neri, ¿en campaña?… ¿Para la alcaldía o para el Senado?

El diputado federal Francisco Martínez Neri anda muy activo haciendo declaraciones sobre Nochixtlán, sobre la Reforma Educativa, sobre la elección interna del Partido de la Revolución Democrática (PRD), sobre una eventual alianza con Morena, y sobre cualquier tema; no pierde oportunidad para salir en los medios masivos de comunicación.
Lo ayuda su posición como coordinador del grupo parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados federal, lo cual lo convierte en voz autorizada y le da foro. Y él le saca jugo a estas circunstancias: Al mismo tiempo de realizar su trabajo como legislador, se proyecta a nivel nacional y se posiciona un poco más en el ámbito local.
El foro es indispensable para su aspiración a la presidencia municipal de la capital oaxaqueña o para el Senado de la República, máxime en la proximidad del proceso electoral para las elecciones del 2018, a iniciar en octubre del 2017. Entonces, no es casualidad, sino causalidad el dinamismo de Martínez Neri en los medios de comunicación.
Es, digamos, una forma sutil de hacer pre-campaña electoral. Claro, y extra legal. Aunque si le preguntamos a Neri, seguramente negará cualquier actividad proselitista; incluso, su aspiración. Así son los políticos, dicen no cuando quieren decir sí.
Martínez Neri estuvo en la lista de aspirantes del PRD a la candidatura a Gobernador de Oaxaca, pero prefirió reservarse para el 2018. Habría pactado allanarse en el 2016 para competir después por la alcaldía de la capital oaxaqueña o por un escaño en el Senado, mientras ejercería su función como coordinador de la fracción parlamentaria perredista en la Cámara Baja.
Y va en ruta porque francamente el PRD oaxaqueño carece de buenos cuadros para las elecciones venideras; sus cuadros internos no tienen la estatura política ni social para ocupar la presidencia municipal del corazón político de la entidad.
QUE LO PERDONE DIOS
En lugares comunes, cuando alguien está muy enojado, suelen decir: “Qué Dios lo perdone, porque nosotros no”. Y Dios perdonará como lo hizo a través de su hijo Jesús con la adúltera, llevada ante éste por escribas y fariseos, quienes tendiéndole una trampa le preguntaron: “Maestro, está mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. Moisés nos manda en la ley apedrear a estas mujeres. ¿Tú qué dices?”
Y Jesús respondió: «Aquel de ustedes que no tenga pecado, que le tire la primera piedra». Los acusadores poco a poco se escabulleron. Entonces Jesús le preguntó: “Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Nadie te ha condenado?» Ella le contestó: «Nadie, Señor». Y Jesús le dijo: «Tampoco yo te condeno. Vete y ya no vuelvas a pecar».
¿El pasaje bíblico es aplicable al presidente Enrique Peña Nieto, considerando su petición de “perdón” al pueblo de México por el “error” que representó la adquisición de la Casa Blanca (según comprada por su esposa Angélica Rivera)? Pues tomando en cuenta que es católico y que ella canceló el contrato de compra-venta, seguramente Dios lo perdonará. Y quizá abone a su favor todas las atenciones para con el Papa Francisco en su visita a nuestro país, ¡hasta lo recibió en Palacio Nacional!
¿Y el pueblo lo perdonará? Eso sí quien sabe. Tal vez no del todo. Ahí están los resultados de las elecciones del pasado siete de junio en que el PRI perdió 7 de 12 gubernaturas, entregando a la oposición cuatro estados donde había gobernando ininterrumpidamente: Quintana Roo, Tamaulipas, Durango y Veracruz.
En el fenómeno multifactorial de la derrota contó, por supuesto, el ejercicio de gobierno del presidente Peña Nieto; jefe político del priismo nacional y, por ende, responsable de las candidaturas de su partido.
Si hubiera pedido perdón antes del cinco de junio, ¿habrían sido menos las derrotas? Es impredecible. Quien sabe si al pueblo de México le resulte suficiente el “disculpe usted”, sin ninguna sanción por un hecho por el cual hay arrepentimiento, pero porque se descubrió.
¿Y en Oaxaca sí lo perdonaron por eso el PRI ganó la elección de gobernador? Bueno, los factores fueron distintos: Fuerte división de la izquierda, traiciones y el desencanto generado por el gobierno encabezado por Gabino Cué Monteagudo, quien co-gobernó con el PAN, con el PRD y con el PT.
En fin, esperemos el 2017 y el 2018 para saber si el pueblo de México ha perdonado al presidente Peña Nieto, quien, por cierto, debe pedir perdón por otros pecados como los siguientes: Prometer sin cumplir bajar el precio de la gasolina (ha vuelto a subir) y generar caos social en el país con reformas estructurales sin consenso.
La falta de pericia política de él y de sus colaboradores han sumido a Oaxaca en la peor de las crisis social, política y económica; situación imperdonable, máxime cuando en el costo van incluidos los muertos por el enfrentamiento en Nochixtlán. Y agréguenle la imposición del próximo gobernador, cuyo pírrico triunfo (comparando su 30% de votación con el 70% de la suma de la oposición) en nada garantiza la estabilidad duradera en la entidad sureña, donde ahora esperan cumpla de inmediato con su promesa del “milagro oaxaqueño”.
VA UN FONDO PARA EL EMPRENDEDOR
Con el propósito de brindar información sobre los programas a cargo de la Secretaría de Economía del Gobierno Federal en apoyo a los emprendedores, la Delegación Oaxaca abrió el «Taller de Convocatorias del FNE».
El FNE es el Fondo Nacional del Emprendedor, mediante el cual, una vez que se emiten las convocatorias respectivas, las micro, pequeñas y medianas empresas, tienen la posibilidad de solicitar apoyos para fortalecerse; o si se trata de nuevos emprendedores, la oportunidad es para crear empresas como fuentes de trabajo, lo cual es un respiro en una entidad tan castigada como Oaxaca.
Muy oportuno el taller, para que los emprendedores estén listos para cuando se abran las convocatorias. Ayudará a mitigar la afectación económica.
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Correo: rosyrama@hotmail.com