México.- El subprocurador de Investigación Especializada en Delitos Federales (SIEDF), de la Procuraduría General de la República (PGR), Arturo Germán Rangel, dio a conocer ayer la entrega de piezas de arte sacro, recuperadas el año pasado en galerías privadas, a sus comunidades de origen.
Se trata de nueve piezas de arte sacro de los siglos XVII y XVIII, entre ellas, tres esculturas de los Reyes Magos, robadas en 2000 de Izúcar de Matamoros, Puebla, las cuales fueron llevadas de regreso ayer mismo a su lugar de origen por una comisión conformada por autoridades y fieles católicos de esa localidad.
Lucio Villalba Barragán, representante de Izúcar de Matamoros, recalcó que la recuperación de estas piezas representa el regreso de la fe y la alegría a su comunidad.
La próxima semana, la iglesia de San Agustín Tlaxiaca, Hidalgo, también tendrá de regreso a su Cristo del Perdón, robada en julio de 2008.
Se trata de una pieza en madera, cuyo robo significó para los feligreses una gran pérdida. “Al entrar a la iglesia, hacíamos una reverencia y ahora no tenemos nada allí. Pusimos un cristito pero no es lo mismo porque esta pieza para nosotros es de mucho valor”, declaró en entrevista Catalina García, una de las representantes de esa comunidad.
Así como estas esculturas, en los próximos días, según indicó en conferencia de prensa Arturo Germán Rangel, se entregarán los cuadros titulados Adoración de los Reyes, El nacimiento de la Virgen, robados en septiembre de 2008 del templo de Santa Matilde, de Pachuca, Hidalgo.
Serán devueltas también las pinturas denominadas Virgen de Guadalupe con San Joaquín y Santa Ana, y Virgen de Guadalupe, robadas el 3 de febrero de 2009 del templo de San Gabriel Ometoxtla, en el municipio Juan C. Bonilla, Puebla. Así como La muerte de Jesús, sustraído el 21 de enero de 2009 del templo de Santa María Tlacatecpa, en el municipio de Contla, Tlaxcala.
Germán Rangel explicó que la recuperación de este conjunto de obras de arte sacro fue resultado de tres cateos realizados el año pasado por el agente del Ministerio Público, adscrito a la Unidad Especializada de Investigación de Delitos Ambientales y Previstos en Leyes Especiales.
Al rescate de lo sagrado
El primero tuvo lugar en febrero de 2010, en una galería ubicada en Tlaquepaque, Jalisco, que tenía a consignación las obras denominadas El Nacimiento de la Virgen , la Adoración de los Reyes Magos, las tres esculturas de los Reyes Magos, así como el Cristo del Perdón. Germán Rangel aseguró que tras estas investigaciones se dio con el paradero de la pintura Virgen de Guadalupe con San Joaquín y Santa Ana, que había estado expuesta para su venta en dicha galería.
Fue en julio de 2010 cuando se llevo a cabo el segundo cateo en la delegación Iztapalapa, en el Distrito Federal, donde fueron asegurados los cuadros: Virgen de Guadalupe, y La muerte de Jesús.
De acuerdo con el funcionario, en el tercer cateo, realizado días después en el estado de Tlaxcala, fueron recuperadas otras obras de arte que “posteriormente serán devueltas a las comunidades de donde fueron sustraídas”.
A partir de estas operaciones, la PGR, en colaboración con representantes de las iglesias y el INAH, comenzaron a realizar un catálogo que registra hasta ahora 450 piezas robadas desde 1999 a la fecha en diversas entidades del país.
Sin embargo, para Carlos Briseño, obispo de la Unidad de Cuidados y Bienes Culturales, de la Conferencia del Episcopado Mexicano, estas 450 piezas registradas en el catálogo, aún en construcción, sólo representan 5% del total de obras de arte robadas.
Cuestionado sobre la ubicación de los responsable del robo de estas piezas de arte sacro, Germán Rangel dijo que en su momento hubieron personas detenidas pero “como el delito no es considerado grave en la legislación y además de eso no habían pruebas, quedaron en libertad”.
Agencia El Universal
