Gerardo Murillo (Dr. Atl 1875-1964) es reconocido dentro de la plástica mexicana por su obra paisajística; sin embargo, poco se sabe de su pasión por la arquitectura colonial, la cual plasmó en el mural que se encuentra en el Patio de Cañones del Museo Nacional de Historia (MNH), Castillo de Chapultepec. Se trata de la obra Vista panorámica de la ciudad de Puebla, que pintó en la segunda década del siglo pasado.
Los historiadores del arte se han centrado en la obra paisajística que desarrolló durante los años 30, por lo que ahora investigadores Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se enfocan en los registros arquitectónicos que pintó en los 20, en los que se destaca el mural en el Castillo de Chapultepec del artista jalisciense.
En 1920, el ingeniero Alberto J. Pani le encomendó a Gerardo Murillo registrar los templos coloniales de México. A partir de esos dibujos, en un escrito el artista destacó que “la cúpula es la forma arquitectónica más perfecta” y estableció una tipología sobre cada uno de los templos que inventarió, explicó el investigador Juan Manuel Blanco, quien junto con su colega Thalía Montes, realiza un estudio sobre la faceta de dibujante de vistas arquitectónicas del Dr. Atl.
La encomienda de Pani dio como resultado la edición de los seis volúmenes de Iglesias de México, en el que, además del Dr. Atl, colaboraron Manuel Toussaint y el ingeniero José R. Benítez con material fotográfico de Guillermo Kahlo y José María Lupercio. “Ese trabajo fue el antecedente de la tarea que ahora desarrolla el INAH con la catalogación de los bienes inmuebles”, apuntó Montes.
Juan Manuel Blanco añadió que el mural Vista panorámica de la ciudad de Puebla (5.55 m x 2.05 m) “es único en su tipo”, y hasta el momento no se han encontrado los bocetos, pero los dibujos y acuarelas que dejó en la colección de Iglesias de México prepararon el camino para su realización.
“En los seis volúmenes, hay obras que muestran paisajes poblanos y que, junto con el registro fotográfico que realizó Guillermo Kahlo, dan cuenta de cómo el Dr. Atl concibió el mural durante la década de los 20”, apuntó el investigador.
Asimismo, Gerardo Murillo participó en la edición del catálogo de la exposición de arte popular que se realizó con motivo del centenario de la Consumación de la Independencia de México.
Durante los años 20, Gerardo Murillo estableció una relación muy especial con Puebla, la consideraba como un “hito representativo de México”, de modo que empezó a concebirla como “la ciudad de las cúpulas”, y la recreó en su mural Vista panorámica de la ciudad de Puebla.
“El Dr. Atl encontró en Puebla una tipología arquitectónica basada en la decoración policromada —abundó Montes—, a partir del revestimiento de azulejos de talavera en paredes y cúpulas. Esta modalidad decorativa hizo que en sus recorridos por México encontrara, en otros estados, iglesias que aludieran al tipo “poblano”.
En el mural Vista panorámica de la ciudad de Puebla, las ilustraciones de la cúpula de la iglesia del Carmen, de la Catedral de Puebla y de la Compañía de Jesús son fácilmente identificables.
Blanco señaló que no se ha precisado cuándo fue pintado el mural, pero se puede inferir que fue entre 1924 y 1930, años en los que se dedicó a trabajar en la colección Iglesias de México. “El Dr. Atl plasmó en su mural una vista idealizada de las cúpulas de las iglesias de la ciudad de Puebla, utilizando colores complementarios (azul y naranja) propensos a la saturación de blanco”.
A principios de la década de los 70 del siglo XX, la obra entró a la colección del Museo Nacional de Historia, y quedó ubicado en el Patio de Cañones, donde puede ser admirado por el público.