El empresario restaurantero de playa Bonfil, Sergio Mejía Vargas dijo que el 70 por ciento del total de restaurantes de la zona Diamante del puerto, operan tras el impacto del huracán Otis.
Agregó que algunos negocios de playa Bonfil han tenido que improvisar en sus establecimientos para ofrecer sus servicios y aprovechar las vacaciones de Semana Santa, ya que son altas las expectativas de visitantes.
En declaraciones en el hotel Emporio, después de la toma de protesta del nuevo consejo consultivo de la Asociación de Mujeres Mexicanas Empresarias capítulo Guerrero, Sergio Mejía dijo que poco a poco se está reactivando la economía local, lo cual se puede ver con las ocupaciones hoteleras de estos primeros días.
“Estamos esperando un plan que nos presente el gobierno federal para la reactivación a los negocios locales, hoy le toca al gobierno federal atender los requerimientos del sector empresarial, por esa razón es que los pocos restaurantes de la zona Diamante o playa Bonfil, estamos operando en un 70 por ciento del 100 por ciento, porque no todos tenemos recursos, y quienes estamos operando lo hemos hecho pues con recursos propios y por esa razón improvisamos”, explicó.
Añadió que los visitantes que han acudido a visitarlos han sido solidarios, sobre todo después de enterarse del huracán, “después de que se reactivó la energía eléctrica y las redes sociales pudieron, comenzaron a llegar a visitarnos, consumiendo en los negocios favoritos, esta Semana Santa es una gran oportunidad para que Acapulco poco a poco se vaya reactivando”.
Sergio Mejía reconoció que los establecimientos tienen problemas en la mano de obra, sobre todo en la contratación de meseros y cocineros, por lo que han llamado a jóvenes de otros municipios a que lleguen a cubrir las vacantes.
Con información de Quadratin
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