Enrique Guzmán y Alberto Vázquez ofrecieron un concierto, en el Auditorio Nacional a tope, en cuyo escenario, cada uno por separado, cantó los mejores temas de su vasta discografía que los ha mantenido como los favoritos del rock and roll, a lo largo de más de cinco décadas de trayectoria.
Aunque el público anhelaba escucharlos cantar juntos, esto no sucedió; sin embargo, la velada estuvo cargada de mágicos temas que remontaron a los asistentes a la época dorada del rock and roll en español, la cual sigue vigente gracias a estos exponentes musicales.
El primero en aparecer fue Enrique Guzmán, quien elegantemente vestido inició el paseo musical después de que al fondo del escenario se proyectó un video en el que Verónica Castro, en uno de sus programas nocturnos de antaño presentó al cantante como «El Rey del Rock and Roll».
A continuación se escucharon los acordes de «Mi corazón canta», primer tema que Guzmán grabó como solista en los inicios de los años 60, después de que ya había grabado con los Teen Tops.
La cascada de éxitos continuó: «Te seguiré», «Más», «Agujetas de color de rosa», «Secretamente», «Tu cabeza en mi hombro», «Gotas de lluvia», «100 kilos de barro», «Lucila», «Popotitos», «La plaga» y «Lo sé».
Otro éxito fue «Acompáñame», que cantaba con Rocío Dúrcal, quien apareció en imágenes a través de un video, lo que el público celebró con un sonoro aplauso.
La escenografía fue sencilla aunque destacó el colorido que logró ambientar el lugar en los años 60, y eso el público lo agradeció con el coro que le prodigó a Guzmán cuando éste cantó «Pensaba en ti».
«Con y por amor», «El último trago», «Las hojas muertas», fueron otros temas que Guzmán regaló a su público que lo recibió; y despidió de pie, después de cantar «Payasito», aunque regresó al escenario a petición del público para cantar «Uno de tantos».
Guzmán se despidió definitivamente después de dar lo mejor de sí para complacer a sus seguidores que le festejaron no solo sus canciones, sino también el buen humor que mostró durante su actuación.
Sin más preámbulos, tocó el turno a Alberto Vázquez, quien inició con «16 toneladas», continuó con «El velador» y «Cosas».
«Ahora me hace falta el aire», indicó, y aunado a la altura de la Ciudad de México, se le complicaba cantar razón por la que «pidió permiso al público» para que le permitiera cantar con el aire que le suministraba un tanque de oxígeno.
Los seguidores, sin objeción alguna, aceptaron, en realidad lo que deseaban es que Vázquez cantara, así que tras un acuerdo solidario siguieron los éxitos como «Fue en un café», «La felicidad llegó», «Blueberry hill», «Tus ojos», «Cuando yo era un jovencito», «Tú significas todo para mí», «Olvídalo» y «O quizás simplemente le regale una rosa».
Al momento de cantar «Bote de bananas», el público se unió al coro del propio Vázquez y de Yolanda y Leticia Salinas, con quienes cantó «Para decir adiós» y «Si la invitara esta noche», respectivamente.»Maracas», y «Anoche me enamoré», fueron otras canciones que el público escuchó en esta presentación que puede marcar el inicio de una gira por la República Mexicana.
Vázquez, también se mostró de buen humor durante los minutos en los que presentó su espectáculo que culminó con «Al modo mío» y su emblemático «El pecador».
Externó su agradecimiento al público por asistir al concierto y enfatizó que «el aplauso es el alimento más grande para quien se dedica al canto».
INF./GRUPO FÓRMULA
