Exhibe Casa Azul muestra sobre ‘El Baño de Frida’

México.- Un total de 24 fotografías en las que se aprecian espejos, prótesis, corsés, medicinas, animales disecados y carteles, entre otros objetos hallados en el baño de la pintora mexicana Frida Kahlo (1907-1954), integran la exposición «El Baño de Frida» , inaugurada anoche en el Museo Casa Azul Frida Kahlo, en esta ciudad.

Se trata de un trabajo de la fotógrafa mexicana Graciela Iturbide, quien exhibe los implementos médicos y ortopédicos, develados en la Casa Azul junto con el archivo de la pintora, dados a conocer en 2006, que en esta ocasión se complementa con un trabajo sonoro de Manuel Rocha, hecho ex profeso.

Al tomar la palabra, Iturbide expresó su beneplácito y afirmó que dichas imágenes fueron tomadas en el baño de Frida, en Casa Azul, el cual permaneció cerrado por más de 50 años.

De acuerdo con la artista de la lente, tras la muerte de Frida, en 1954, Diego Rivera (1886-1957) decidió cerrar dos baños con objetos y documentos de Frida; «en 2004 se abrieron las puertas de estos espacios y me invitaron para dejar un testimonio fotográfico de este momento», recordó.

A partir de dicha experiencia nació la muestra «El baño de Frida», la cual se ha presentado en el National Museum of Women in the Arts, en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en el Teatro Fueddu e Gestu, en Italia; en la Galería López Quiroga en la capital mexicana, y en la Fototeca del estado de Puebla.

A manera de registro visual, Iturbide realiza naturalezas muertas; entre las imágenes que llaman la atención se ubica una fotografía que encuadra los pies de la propia Graciela Iturbide sobre la bañera, emulando a manera de homenaje la obra «Lo que el agua me dio», de Frida Kahlo.

Esta obra parte de las fotografías de Graciela Iturbide, quien realizó su propia exploración y trabajo con los objetos encontrados en el baño. Al mismo tiempo, Manuel Rocha crea una obra independiente de arte sonoro, semejante a una foto en movimiento sonoro.

La directora de ese espacio museístico, Hilda Trujillo Soto, recordó que la muestra inicio hace un par de años cuando Iturbide llegó al museo y le solicito si podía realizar una serie placas en el baño.

«Al final, nosotros nos dimos cuenta del acontecimiento que era abrir esos baños hasta que vimos las fotografías que nos reveló Graciela», indicó Trujillo.

Entre las piezas que reflejan los padecimientos de la pintora, destaca una prótesis que utilizó cuando le amputaron una pierna; asimismo, figuran una tortuga, unas aves embalsamadas, retratos de Lenin, Stalin, en carteles y frascos vacíos del analgésico «Demerol».

La muestra exhibe, además, un discurso acústico a cargo de Manuel Rocha, quien presenta una instalación sonora ex profeso para la exposición con una duración de seis minutos, en la que se percibe la caída de agua en la bañera de la pintora.

Para Rocha, creador de la obra sonora, «Graciela Iturbide fotografió uno de los santuarios privados de Kahlo: el lugar que le permitió hacer frente a su dolor, a sus problemas personales y luchas».

Además de los elementos esenciales de un cuarto de baño, Rocha afirmó ver en las fotografías, los elementos necesarios para una persona que tiene necesidades especiales.

Sobre su pieza, comentó no interesarle reproducir el lado trágico o el sufrimiento de Frida, sino el lado íntimo y apacible: sus sueños.

«Lo que se escucha es una pieza que recrea el ambiente cerrado y la interiorización que se experimenta en el baño. El surrealismo y el mundo del subconsciente confluyen con elementos abstractos y sonidos naturales como el canto de los pájaros o el agua en la tina», señaló.

«El Baño de Frida» estará abierta hasta el próximo 22 de julio en el recinto situado en Coyoacán, en el sur de esta ciudad.

Agencia El Universal