La diócesis católica de Milán ha tenido que tomar medidas para hacer frente al gran volumen de consultas sobre exorcismos.
Ha duplicado el número de sacerdotes que practican exorcismos y ha puesto en marcha una línea de atención telefónica.
Se ha pasado de tener a 6 curas entrenados especialmente para hacer exorcismos a 12, y se han hecho públicos sus nombres y números de teléfono para atender las consultas de los fieles -segun nota de BBC Mundo-
La línea de atención funciona varias horas al día y sirve para reservar una cita con un sacerdote local.
Monseñor Angelo Mascheroni, que lleva entrenando a curas para practicar exorcismos desde hace 15 años, dice que la demanda se ha disparado últimamente.
«Por el número de llamadas que recibimos podemos decir que la necesidad se ha duplicado», asegura al sitio web Incrocinews, ligado a la Iglesia Católica Italiana.
Un empleado de la diócesis le dijo a la BBC que cada día reciben entre tres y cuatro llamadas.
No todo son demonios
La diócesis de Milán recibe hasta cuatro consultas diarias en su línea telefónica de exorcismos.
Mascheroni asegura que las consultas provienen de todo tipo de personas.
«Tenemos jóvenes y adultos, hombres y mujeres, gente con diferentes niveles educativos, desde fieles que abandonaron la escuela a graduados», explica.
«A menudo los padres me llaman diciendo que a su hijo o hija no le va bien en las escuela, que se está rebelando o que toma drogas.
Ahí no hay ningún demonio, pero a los 18 años los jóvenes no quiere tener limitaciones.
Es importante ser capaz de distinguir las diferentes situaciones», dice Mascheroni.
Sin embargo, sostiene que sí existen casos en los que se requiere realizar exorcismos, aunque son muy limitados.
«Todo el mundo necesita que le escuchen con calma, nadie debería sorprenderse por las palabras que oye porque Dios es siempre más fuerte que el demonio. Es cierto que existen los fenómenos diabólicos, pero al menos en mi experiencia, son muy pocos».