El Fondo de Cultura Económica (FCE), que este año celebrará su 80 aniversario, ampliará en este 2014 sus puntos de venta para contar con 30 librerías en todo el país y abrir una nueva filial en Ecuador, indicó su director, José Carreño Carlón.
Durante la conmemoración de los 25 años de Ediciones Cal y Arena, realizada en el Palacio de Bellas Artes, José Carreño Carlón aseguró que este marco es ideal para además replantear la misión o vocación latinoamericana del FCE, para “tratar de lograr, entre todos, esa anhelada y nunca lograda circulación horizontal del libro latinoamericano”.
El funcionario recordó que en América Latina viajan más los escritores que sus libros, por lo cual muchas veces es difícil conseguir textos de otros países de la región, como Chile, pero también aquellos que se editan en estados como Veracruz e incluso Jalisco.
Por ello, dijo, “el Fondo de Cultura Económica está obligado a cerrar filas con las editoriales, llamémoslas independientes, nacionales, para asegurar la circulación de sus libros en todo el territorio nacional”.
Aseguró que el FCE, como institución ya octogenaria en la distribución de libros, “cuenta con 23 puntos, centros culturales, librerías en la República y este año van a ser 30, y en sus filiales en el mundo van a llegar a 10, con la que abriremos en Ecuador”.
Por otro lado, Carreño Carlón celebró el aniversario de Ediciones Cal y Arena, fundada hace 25 años por un grupo de jóvenes escritores que, dijo, “desafiaban la crisis económica nacional, la década perdida en la deuda, el muy convulso contexto mundial, con el propósito de abrir espacios para la publicación de las obras propias”.
Recordó que entre los fundadores de esta casa editorial se encuentran escritores de la talla de Rafael Pérez Gay, Alberto Román, Sergio González Rodríguez, Luis Miguel Aguilar, Roberto Diego Ortega y José Joaquín Blanco, quienes se dieron a la tarea de publicar novela, cuento, poesía, crónica, ensayo político, histórico, comunicación y testimonios.
Por lo que “hoy, a cinco lustros de distancia, tiene un brillante catálogo de autores que sorprende por su vitalidad, por su riqueza, no me queda más que felicitar y reconocer el trabajo y fortaleza de esta editorial formada por escritores, no empresarios”.
Rafael Pérez Gay, director de Ediciones Cal y Arena, dedicó la celebración de estos 25 años al recién fallecido politólogo Arnaldo Córdova y advirtió que en nuestro país hay un desprecio por el libro mexicano y un sometimiento al libro español.
Por ello reconoció el apoyo que brinda el Fondo de Cultura Económica cada año con la exposición de libros de editoriales pequeñas y medianas que tiene un gran éxito. Sin embargo, consideró necesario sacar al libro de las librerías y llevarlo a otros lugares, toda vez que el 48 por ciento de los mexicanos nunca han visitado una librería.
En tanto, el gerente de Exhibición de Librerías Gandhi, Francisco Goñi, consideró los 25 años de Cal y Arena como una “fiesta de la cultura, ante el panorama editorial caótico, cambiante de la industria librera, de la industria editorial, no sólo en México, sino de América Latina y el mundo”.
Aseguró que celebrar 25 años es “un acontecimiento brutal, ya que la cantidad de adversidades, de riesgos que hay que sortear, no sólo económicos, personales, coyunturales, políticos, son demasiados; 25 años es un cuarto de siglo impresionante, han desfilado personas, escritores de primera línea por esta casa”.
Finalmente, Diego Rabasa, director de la editorial Sexto Piso, destacó que hace 25 años Cal y Arena comenzó a abrir camino para las nuevas generaciones de libreros, pues a cinco lustros “representa una de esas fisuras por donde se cuela un pequeño espacio de esperanza”.
