La posibilidad de que la edición impresa conviva con el formato electrónico centró hoy buena parte de los debates del II Foro Mundial de la Unesco sobre la Cultura, en la ciudad italiana de Monza, en el que las editoriales expusieron su incipiente apuesta hacia la digitalización de sus novedades.
En los matices que definen a la edición electrónica e impresa terció el escritor chileno Antonio Skármeta, quien precisó que la información se «presta al lenguaje sucinto, sintético» como el utilizado en las redes sociales, como Facebook o Twiter, en los blogs e incluso en los periódicos.
En contraposición, añadió, la literatura, que definió como «la genialidad de contar historias por placer» y que necesita de «tiempo para explorar en la complejidad sin una finalidad última» , encuentra en el libro de papel su aliado.
«No creo, aunque pudiera ser, que alguien que tienen el hábito de leer literatura en papel prefiera el modo electrónico» , dijo el escritor chileno, que acaba de publicar «Los días del Arcoíris» y conocido mundialmente por su obra, que dio también lugar a la película, «El cartero de Neruda» .
A la finalidad pragmática del soporte electrónico también se refirió Miguel Barrero, directivo del grupo español Santillana, con gran implantación en Latinoamérica, al detallar que es más fácil para un niño entender el funcionamiento del aparato digestivo con una animación en tres dimensiones que una «explicación estática» de un libro de texto.
No obstante, consideró que una obra poética puede que se disfrute más en una edición impresa.
«Depende de la experiencia que quieras tener con la lectura así elegirás el soporte» , añadió Barrero, quien opina que, a la hora de elegir un formato u otro, no influye tanto el tipo de texto como las circusntancias personales.
Convencido de que convivirá el papel con el soporte digital, Barrero señaló, que el incremento de la edición digital conllevará una «mayor participación de los lectores» que no tiene que ser proporcional al aumento del número de estos.
En su opinión, lo que ha ocurrido es que «el ecosistema del libro se ha enriquecido con un soporte nuevo» .
Barrero observa una tendencia por parte de las editoriales «menos reacia» al incremento de las publicaciones electrónicas, y ello se debe, apuntó, a los buenos datos que proceden de Estados Unidos (donde las ventas de e-books superan a las ediciones impresas) y que en el ámbito de la educación, en un contexto de crisis, la publicación de textos electrónicos es más barata.
Miguel Barrera pronosticó la perdida de algunos actores en la cadena tradicional del libro, es decir, desde que se crea hasta que llega a manos de los lectores. Un extremo en el que coincidió el directivo del sello Mondadori, en Italia, Ricacardo Cavallero, quien dijo que este cambio viene dado porque ahora «las editoriales llegan directamente al lector» .
Por ello, prcisó, es importante estudiar las estrategias para esta relación directa con el lector que conlleva «la renuncia a privilegios del actor económico» .
Se trata de un «sistema antiguo» que establecerá una lucha en la «que algunos desparecerán y a modo de ejemplo citó a editores que no conzcan bien la base de lectores y a agentes literarios.
Subrayó que para una editorial sus dos objetivos más importantes son » el autor y el lector » y no tener miedo a » equivocarse y a tirar por la ventana los privilegios «.
La ex directora de la Biblioteca Nacional y presidenta del Comité Científico de este foro, Milagros del Corral, resaltó al valorar la jornada de hoy » el pasito adelante » de las editoriales respecto a la edición digital, y observó flexibilidad en sus posiciones.
Tras la inauguración, en la mañana de hoy con la intervención de Corral y otros expertos, se desarrollaron distintos paneles centrados en » La economía del e-book «, » El blog versus periódico de papel «, » El futuro de la palabra escrita y la lectura » y los » Cambios en la cadena de producción y distribución».
Agencia El Universal