Galardonan a Riccardo Muti con el Príncipe de Asturias 2011

El director de música clásica italiano Riccardo Muti fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2011, anunció hoy en Oviedo el Jurado encargado de su concesión.

El presidente del jurado, José Lladó y Fernández-Urrutia, destacó que Muti reconocido como uno de los mejores directores de música clásica del mundo, ha dirigido con pasión y virtuosismo a las más prestigiosas orquestas, dejando una profunda huella con sus interpretaciones.

Destacó su trayectoria que ha alcanzado una dimensión universal vinculada con los mejores teatros del mundo, su vocación investigadora y su formación humanística.

‘Muti hace honor a la tradición clásica del director capaz de extraer el espíritu de cada obra a través de las mejores cualidades de las orquestas. Consigue con ello transmitir al público el mensaje intemporal de la música’, subrayó.

Esta candidatura fue propuesta por Teresa Berganza, Premio Príncipe de Asturias de las Artes 1991.
Muti nació en 1941 en Nápoles (Italia) , cursó estudios de piano en el Conservatorio de San Pietro, en Majella, y de composición y dirección de orquesta en el Conservatorio Giuseppe Verdi de Milán.

En 1967, tras ganar el premio Guido Cantelli, su carrera alcanzó una notable proyección internacional y ha sido director del Maggio Musicale Florentino (1968-1980) y director de la London Philarmonia (1972) , en la que después ejercería como director musical (1979-1982) .

Entre 1980 y 1992 dirigió la Orquesta de Filadelfia y en esa época fue nombrado director musical del Teatro alla Scala de Milán, (1986-2005) y, en 1987, director principal de la Orquesta Filarmónica creada en 1982 dentro del teatro milanés.

Desde 2010, Muti es director musical de la Orquesta Sinfónica de Chicago.

Bajo su batuta, la Scala viajó a Alemania, Rusia, España, Francia y Japón por lo que ha dirigido producciones operísticas en los más importantes escenarios internacionales.

En 1988 dirigió el ‘Réquiem’ de Verdi en la catedral de Notre Dame y en 1992 condujo los conjuntos de la Scala en la Orquesta de la Opera de Frankfurt.

En 1995, dirigió ‘La Traviata’ en el Festival de Salzburgo e inauguró la temporada operística con ‘La flauta mágica’.

En 1996 dirigió el concierto extraordinario del cincuentenario de la remodelación de la Scala y, dos
años después, cosechó otro gran éxito con la ejecución del wagneriano ‘Ocaso de los dioses’.

El Jurado de este Premio, convocado por la Fundación Príncipe de Asturias, estuvo presidido por José Lladó y Fernández-Urrutia, e integrado por Mercedes Alvarez González, Carlos Fitz-James Stuart Martínez de Irujo, Guillermo García-Alcalde Fernández y Rosina Gómez-Baeza y Tinturé.

Asimismo, por Juan Carlos Laviana Díaz, Emilio Marcos Vallaure, Hans Meinke, Miguel Muñiz de las
Cuevas, Benigno Pendás García, Mariano Puig Planas, Benedetta Tagliabue, Amelia Valcárcel Bernaldo de Quirós y José Antonio Caicoya Cores, como secretario.

Agencia El Universal