Hemos recibido preocupantes noticias de Rusia, un país aliado en la lucha para proteger el Ártico: la mayor asociación de pueblos indígenas rusos ha sido obligada a cerrar sus puertas por orden del Gobierno de ese país.
El Ministerio de Justicia ruso suspendió las actividades de la Asociación Rusa de Pueblos Indígenas del Norte (RAIPON) hasta abril de 2013, argumentando inconsistencias entre los estatutos de la organización respecto a la Ley Federal de Rusia.
RAIPON ha estado trabajando sobre la base de esos estatutos durante 22 años, sin comentario alguno de las autoridades. Desde su creación, en 1990, esta organización unió, promovió y protegió los derechos de los 41 grupos de los pueblos indígenas del norte de Rusia, reuniendo a 300 mil personas que no siempre tienen voz en la arena política.
La suspensión de las actividades de RAIPON tuvo lugar en la víspera de la apertura del Consejo Ártico en Haparanda, Suecia (donde RAIPON es un participante permanente), y en el período previo a la 7ª Asamblea de los Pueblos Indígenas del Norte, Siberia y el Lejano Oriente de Rusia, prevista para marzo de 2013.
En agosto de 2012, RAIPON, junto con representantes de otros pueblos indígenas del norte de Rusia, apoyaron la demanda para prohibir la producción de petróleo en la plataforma continental del Ártico, en las áreas de uso tradicional de la tierra, y la organización convocó a todos los pueblos indígenas del Ártico a unirse a esta demanda.
Al respecto, el Consejo Ártico emitió la siguiente declaración:
“Los Altos Funcionarios del Ártico y los Participantes Permanentes del Consejo
Ártico expresan preocupación acerca de la ausencia de RAIPON del trabajo del Consejo Ártico, consecuencia de la decisión adoptada por el Ministerio de Justicia de la Federación de Rusia de suspender las actividades de RAIPON hasta abril 2013, y como una petición de medida cautelar del Funcionario Mayor del Ártico de la Federación Rusa, en estrecha cooperación con RAIPON y el Ministerio de Justicia de la Federación de Rusia para facilitar, en su caso, el cumplimiento del importante papel de RAIPON como participante permanente en el Consejo Ártico”.
Por su parte, el Director Ejecutivo de Greenpeace Internacional, Kumi Naidoo, escribió la siguiente carta al presidente Putin, pidiéndole intervenir y revertir esta decisión, para que RAIPON pueda continuar sus actividades legítimas en representación de los derechos e intereses de los Pueblos Indígenas del Norte de Rusia.
Estimado Sr. Presidente,
Me dirijo a usted para pedirle que intervenga con carácter de urgencia para evitar la disolución de la Asociación Rusa de Pueblos Indígenas del Norte (RAIPON) bajo el argumento de supuestos tecnicismos menores.
A principios de este año, en Moscú, conocí a los representantes de los pueblos indígenas de Rusia. Me hablaron de su continua lucha por la autodeterminación y por la protección de sus tierras y medios de subsistencia. Se habló de la conducta imprudente de la industria del petróleo y la consiguiente destrucción del medio ambiente que ellos están enfrentando. Casi a diario, los derrames de petróleo son la inevitable plaga para los ríos y destruyen los bosques del norte de Rusia.
Como seguramente ya es de su conocimiento, los pueblos indígenas de Rusia están experimentando en carne propia el constante desastre ambiental: sus ríos están muriendo y sus comunidades se enfrentan a tasas crecientes de cáncer. Durante mucho tiempo han tratado de hablar, pero han sido recibidos con indiferencia, o peor aún, con intimidación.
Esta semana, el Ministro Ruso de Justicia ha propuesto prohibir la principal organización que representa a los pueblos indígenas del ártico ruso. La Asociación Rusa de Pueblos Indígenas del Norte (RAIPON), que funciona como organización de apoyo para la mayoría de los pueblos indígenas en el norte de Rusia, está viendo amenazado su estatus legal.
Se afirma que cuestiones administrativas menores están impulsando esta decisión repentina. Entiendo que RAIPON ha sido cerrado por el Ministerio de Justicia debido a una norma administrativa que establece que ‘Toda Organización Rusa’ debe estar operando en más de un 50 por ciento en las provincias de Rusia, es decir, al menos 42 de los 80 grupos que la integran. RAIPON representa a tribus muy diferentes y grupos que no tienen estatus legal, como pastores de renos, por lo que en RAIPON en realidad opera en más de 42 provincias como una voz crítica para las entidades rusas que, oficialmente, no existen. Estoy seguro de que ambos, usted y yo, podemos ver que esto es sólo un tecnicismo, y le insto a intervenir para resolver este problema. No puede ser que una voz tan importante sea obligada a disolverse por meros tecnicismos.
Si esto no se resuelve, y si RAIPON se separa y es expulsado del Consejo Ártico, donde ha tenido un lugar desde que el Consejo se formó, el mundo lo verá como un intento deliberado para silenciar las voces disidentes en el debate sobre el futuro del ártico ruso. En particular, se presenta como una cínica maniobra para silenciar a aquellos que hablan acerca de los impactos de la explotación petrolera.
RAIPON ha sido firme y valiente para ayudar a dar voz a los pueblos indígenas de Rusia – tanto a nivel nacional como internacional. Donde los pueblos indígenas se atrevan a alzar la voz deben ser apoyados y capacitados, no castigados por su valentía.
En nombre de Greenpeace, hago un llamado a usted y al Gobierno Ruso para que garanticen el futuro de RAIPON, incluida su participación continua en el Consejo Ártico, organismo que guía la cooperación en la región, donde RAIPON posee la condición de participante permanente. RAIPON es un socio clave en el Consejo Ártico y se debe encontrar una manera para que pueda seguir representando los intereses de los Pueblos Indígenas del Norte.
Atentamente,
Dr. Kumi Naidoo, Director Ejecutivo de Greenpeace International