Hallan 11 plumas de dinosaurio en ámbar

Paleontólogos encontraron 11 plumas de dinosaurio conservadas en ámbar que datan de hace 70 a 85 millones de años (Cretácico tardío) cerca del lago Grassy en Alberta, Canadá.

El hallazgo lo hizo el paleontólogo Ryan McKellar de la Universidad de Alberta en con su equipo al analizar más de 4000 trozos de ámbar en las colecciones de museos de Canadá.

Los pedazos de ámbar muy transparente-en su mayoría de menos de 1 centímetro de diámetro-habían sido retirados de los depósitos de carbón establecidas alrededor de 78 millones o 79 millones de años atrás, cuando la región, y luego a nivel del mar, era un humedal cubierto por bosques de coníferas.

Tras una inspección más cercana, McKellar y su equipo notaron que algunas de las plumas se parecen a los encontrados en las aves modernas, con púas y un pequeño velcro como ganchos que se adhieren barbas adyacentes para crear una superficie resistente vuelo.

Algunos de estos fragmentos procedían probablemente de un pájaro con capacidad de vuelo. Otros contenían estructuras que ayudaron a las plumas a absorber el agua, similares a los encontrados en la que poseen las actuales aves acuáticas, que utilizan las plumas llenas de agua para contrarrestar su flotabilidad cuando se sumergen bajo la superficie para perseguir a sus presas o para forraje en un fondo del lago. Estas plumas posiblemente provenían de una antigua ave acuática.

Sin embargo, otras estructuras incrustadas en el ámbar no se parecen a nada visto en ninguna criatura viviente hoy.

«No estamos absolutamente seguros de lo que son, pero estamos bastante seguros de que no son hongos ni pelos de mamífero. Podrían ser protoplumas, porque se asemejan a las estructuras carbonizados encontrados en algunos fósiles chinos preservados en los sedimentos, que a pesar de la conservación exquisita de tejidos blandos como las plumas, no suelen conservar los pequeños detalles», señaló McKellar a Science en donde publicó su estudio.

Aunque algunas de las plumas y protoplumas parecen casi transparentes, otros son muy pigmentadas y, probablemente, fueron, en la vida, una de color marrón oscuro, gris oscuro o negro.

Los estudios previos de fósiles preservados en las rocas se han utilizado técnicas de rayos X de fluorescencia para distinguir la concentración de cobre y otros metales traza que se unen a los melanosomas, las estructuras portantes de pigmento en las plumas, lo que dando ideas sobre los patrones de color general de las aves a principios tales como Archaeopteryx y Confuciusornis, que vivieron hace unos 125 millones de años.

Algunos especialistas matizan el hallazgo pues en los pedazos de ámbar no se encontraron evidencias de huesos o piel por lo que se queda abierta la posibilidad de que esas estructuras no estén asociadas con los dinosaurios.

«De hecho podrían ser algo completamente nuevo que no se ha conservado en el resto del registro fósil», dijo Richard Prum ornitólogo evolutivo en la Universidad de Yale

Agencia El Universal