Alex Schaefer lleva a cabo, a través de su pintura, lo que muchos de nosotros quisiéramos hacer: prender fuego a los principales bancos del mundo.
Alex Schaefer era hasta hace poco un discreto pintor originario de California. Impartía clases de pintura en el Art Center College of Design, en Pasadena, y a sus 41 años de edad jamás había vendido una de sus obras en más de mil dólares. Sin embargo, hace unos meses, la carrera artística de Shaefer dio un vuelco que él seguramente nunca imaginó.
Su serie de sucursales y oficinas bancarias ha alcanzado fama internacional y el valor de sus cuadros ha ascendido en un 2,500%. Y es que Shaefer retrata escenarios imaginarios que proyectan lo que millones de personas desearían hacer: incendiar a los culpables de la crisis financiera que ha castigado a buena parte de la población mundial durante los últimos dos años.
“Empecé retratando edificios de todo tipo incendiados pero, a medida que crecía mi frustración contra las entidades financieras, el dinero y la economía, mi pintura evolucionó de manera natural hacia los bancos ardiendo”, declaró el artista al diario La Información.
A través del más grande sistema de subastas en línea, eBay, este californiano que logró sintetizar el enojo y la frustración colectiva a través de sus pinturas, logró vender un par de obras: la primera, un cuadro que muestra al Bank of America incendiándose y el cual, a pesar de solo medir 15 por 20 centímetros, alguien adquirió en $3,600 dólares superando a otras 39 ofertas; su otra venta superó los $25,000 dólares, luego de que un comprador alemán venciera a otros 69 postores.
Y es que más allá de tener o no una técnica impecable o una propuesta gráficamente novedosa, lo que Schaefer ha logrado es canalizar el sentimiento colectivo, cristalizarlo a través de una expresión artística —una de las funciones básicas del arte.