“Antes de que sea tarde que él se entregue al Señor, porque ya probó el mundo, ya supo lo que fue lo del mundo y ahora que busque a Dios para que sepa que El es el único que lo puede proteger y ayudar en todos los problemas”.
Así lo dijo María Consuelo Loera Pérez, madre de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, en entrevista con la cadena Univisión.
La madre de El Chapo confesó a la periodista María Antonieta Collins que nunca imaginó que su hijo se llegaría a convertir en uno de los criminales más temidos en todo el país y los más buscados en el mundo.
A sus casi 86 años, que cumplirá el 2 de mayo, doña Consuelo, como se le conoce en el pueblo ubicado en lo alto de la sierra de Badiraguato, vive ajena al mundo de lujos en el que se sumergía su hijo.
Lejos están de ella las siete residencias de Culiacán, con sus sofisticado sistema de túneles para escapar y sus 43 automóviles (la mayoría de lujo) con valor superior a los 21 millones de pesos.
Su mundo se limita a una biblia, la cual asegura que la ha leído en dos ocasiones, y fotografías de familiares.
Doña Consuelo no reniega ser la madre del poderoso capo preso hace una semana en impecable operativo de la Armada de México. “Yo soy madre y él siempre será mi hijo. Siempre seré su madre. En cuanto me digan que puedo visitarlo en prisión lo haré», dice.
Pese a su edad y a los múltiples sobresaltos de las últimas fechas asegura sentirse bien de salud, porque Dios le da la fortaleza que necesita.
Ruega a Dios que proteja a su hijo… pero también a las autoridades, a quienes pide que lo cuiden y lo que puedan hacer en bien de él que lo hagan- «Dios se los recompensará un día cuando los llame a rendir cuentas», dice.
Reitera:
“Dios me está fortaleciendo, me da las fuerzas y sé que él está conmigo y con mis hijos y sé que él va a tocar los corazones de la ley que lo tiene detenido y que vean que es un hombre, no porque yo lo diga. Mucha gente está lamentando lo que está pasando con él”, dijo.
Tan es así, que asegura que están orando por él, en todas las iglesias. Doña Consuelo lleva de bautizada en la Iglesia Apostólica en la Fe de Cristo Jesús poco más de 34 años.
Y concluye con la periodista:
«Si quieren preguntarme cosas de mi hijo no lo voy a responder. Eso pregúntenselo a él, que al fin que ya lo tienen allá”
Pero también la acompañan en su recámara los recuerdos: fotografías de