Este martes 21 de febrero, el titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Raúl Cervantes, ofrecerá una disculpa pública y reconocerá la inocencia de tres mujeres indígenas Hñähñú, en un evento que se realizará en el Museo Nacional de Antropología e Historia.
Las tres mujeres indígenas son Jacinta Francisco Marcial, Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio, quienes pasaron más de tres años en prisión.
El pasado 14 de febrero se anunció la disculpa pública, luego de que hace un año, la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) exigió las disculpas públicas a la PGR, luego de que la dependencia federal se había negado a indemnizar y reconocer la inocencia de las afectadas.
Ahora, en cumplimiento a las sentencias emitidas por el Tribunal Federal de Justicia Administrativa, el titular de la PGR encabezará el acto de disculpa a las tres mujeres indígenas. El evento será transmitido en vivo, a través de www.gob.mx/pgr y por el canal de YouTube del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez.
Las tres mujeres indígenas participarán en el evento junto con el maestro Mario Patrón Sánchez, director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, en su carácter de representante legal, señala un comunicado de la PGR.
¿Cómo fue el caso de las mujeres indígenas?
En agosto de 2006, Jacinta, junto con otras dos indígenas que vendían aguas frescas en un tianguis de Querétaro, fueron detenidas por supuestamente privar de la libertad a seis agentes de la PGR durante un zafarrancho que los funcionarios de la Procuraduría sostuvieron con comerciantes informales tres meses antes, luego de que los policías intentaron despojarlos de mercancía, en un operativo para el cual carecían de autorización.
Por esta acusación de secuestro, Jacinta fue sentenciada a pasar 21 años en prisión, con un juicio en el que nunca se presentaron pruebas en su contra y en el que la indígena otomí careció de la asistencia de un intérprete, violándose así distintos ordenamientos nacionales e internacionales en materia de derechos humanos, ya que en el momento del proceso penal Jacinta apenas entendía el español.
Al apelar esta sentencia, la defensa de la vendedora de nieves, madre de seis hijos, demostró que a Jacinta se le atribuyó una declaración fabricada, escrita en español, que ella no pudo haber realizado por su incomprensión de dicha lengua.
También se demostró que materialmente es imposible que ella, junto con las otras dos mujeres indígenas, pudieran privar de la libertad a seis agentes.
Por esas razones, un Tribunal Unitario revocó la sentencia de 21 años de cárcel y ordenó reponer el proceso en contra de la indígena otomí, ante lo cual la PGR decidió no ejercer nuevas acciones en su contra y Jacinta pudo recuperar la libertad.
Desde mayo de 2014, el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (TFJFA) falló a favor de la demanda de resarcimiento moral y material, interpuesta por Jacinta Francisco Marcial y otras dos mujeres indígenas en contra de la PGR.
El fallo del TFJFA establece que la PGR hizo mal su trabajo por lo que a Jacinta se le debe reparar el daño: “Jacinta, tienes razón. La PGR hizo mal su trabajo por lo que se te va a indemnizar”.
Aún cuando Jacinta recuperó la libertad desde 2009, hasta la fecha su inocencia no había sido oficialmente reconocida y los responsables de los abusos cometidos en su contra no habían sido sancionados.
Con información de Agencia