El presidente de Rusia, Vladimir Putin, lanzó un nuevo ataque a quienes describió como «enemigos de Moscú» y defendió una vez más la anexión de Crimea -según nota de BBC Mundo-.
En su discurso sobre el estado de la nación, Putin dijo que «algunos en occidente» buscan desmembrar a Rusia y afirmó que la crisis en Ucrania es una excusa para contener a Moscú.
En clara referencia a Estados Unidos y la Unión Europea, el mandatario tachó de «claro cinismo» el respaldo occidental al derrocamiento del presidente ucraniano Victor Yanukóvich en febrero pasado -lo que calificó de «golpe de Estado»- y a la violencia contra los civiles en el este de Ucrania.
Putin agregó que, incluso sin la anexión de Crimea y la crisis en Ucrania, occidente «habría encontrado otro pretexto» para imponer sanciones económicas a Rusia.
El presidente ruso criticó a occidente por apoyar al ejército ucraniano en su represión de la población prorrusa, como el suceso ocurrido en Odessa en mayo pasado «cuando la gente fue quemada viva».
En materia económica, Putin prometió congelar los impuestos durante los próximos cuatro años y una amnistía para los empresarios que trasladen sus fondos offshore a bancos rusos.
La economía rusa ha sido duramente afectada por sanciones impuestas tras la anexión de Crimea. El corresponsal de la BBC en Moscú señaló que el mandatario buscó con su mensaje decir a la población que la crisis económica no es producto de sus políticas sino de las sanciones impuestas por occidente.