SSA…México preparado para enfrentar el Ébola

En México no se tiene registrado caso alguno de infección por virus de ébola, sin embargo, la Secretaría de Salud del gobierno de la República tiene la capacidad de diagnóstico, infraestructura hospitalaria de alta seguridad y personal entrenado en materia de seguridad para atender un posible caso.

A través de un comunicado se informó que se cuenta con el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE), un organismo estratégico de alta seguridad y nivel de diagnóstico, con capacidad para confirmar algún probable caso de virus del ébola, ya que es un centro para la prevención y control de diversas afecciones que podrían tener graves impactos en la salud de la población.

El InDRE es el complejo de laboratorios más moderno y más grande de América Latina, genera información de calidad, coordina y es referencia de la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública, por lo que provee información estratégica para la toma de decisiones en la protección de la salud de los mexicanos.

Como parte del plan de preparación ante un posible caso de virus de ébola, se llevó a cabo el Curso Teórico Práctico: Atención de Casos de Enfermedad por Virus del Ébola, al que asistieron más de 100 profesionales de la salud del país.

Se designaron unidades hospitalarias de referencia, siendo El Centro Nacional de Investigación y Atención a Quemados del Instituto Nacional de Rehabilitación centro de referencia en el país para atender cualquier caso que se llegara a presentar por las características de sus instalaciones.

El CENIAQ cuenta con 12 cubículos perfectamente aislados que tienen una barrera, y el acceso es estrictamente sólo para el personal directamente involucrado con la atención de los pacientes.

El sistema de aire de cada uno de estos cubículos es aislado, lo que permite separarlo del aire exterior y sobre todo de otras zonas del mismo edificio.

En el documento se enfatiza que además de la infraestructura y personal especializado, la Secretaría de Salud cuenta con suficiente cantidad de equipo de protección para el personal de salud, para que, en caso necesario, se distribuya en los centros hospitalarios que tengan que hacer frente a este problema.

También se cuenta con los protocolos de vigilancia epidemiológica, así como los manuales para la atención clínica de los pacientes.