Los lectores más jugones conocerán la compañía Razer por sus periféricos orientados al gaming, como ratones ópticos de altísima sensibilidad, sets de auriculares o teclados mecánicos especialmente diseñados para el máximo confort durante el juego. Ayer, la firma presentaba — por segunda vez — algo totalmente distinto a su línea habitual de productos: El Razer Switchblade, un pequeño ordenador orientado a los videojuegos, alimentado por un procesador Atom Z960.
Siendo estos procesadores un componente clave para netbooks de la mayoría de fabricantes, uno se pregunta cómo es posible que con esto se pueda montar una mini estación de juegos exigentes, y al parecer la clave está en los acuerdos a los que Razer ha llegado con desarrolladores chinos independientes para la optimización tanto de la interfaz de usuario, como del rendimiento.
El director de marketing de la división de Netbooks y Tablets de Intel, Brad Graff, ha declarado que el fabricante de CPUs ha trabajado codo con codo junto a Razer para traer la “plataforma PC de juegos portátil de próxima generación” El diseño de Switchblade toma ventaja de toda la potencia de la que dispone el procesador Atom de doble núcleo a 1.70Ghz, ofreciendo el rendimiento necesario para ejecutar juegos 3D en un formato pequeño y ligero para permitir una nueva forma de jugar en ordenadores portátiles, con un consumo muy inferior al de un laptop para juegos tradicional
Esta no es la primera vez que una compañía crea un ordenador portátil de dimensiones reducidas con capacidades para gaming, siendo Alienware uno de los pioneros con su M11x, aunque las especificaciones técnicas de uno y otro serían como comparar el Sol con la Luna. Mientras que Alienware ha optado por empaquetar en el diminuto form-factor el hardware más potente que ha podido encontrar, el enfoque de Razer ha sido bien distinto, y con los componentes elegidos, ha sido capaz de alcanzar entre 4 y 6 horas de juego continuado en una sola carga.
El dispositivo fue presentado por primera vez en Enero, durante el CES de Las Vegas, aunque en aquel momento no era más que un concepto sobre un lienzo electrónico. A día de hoy, las especificaciones finales del Razer Switchblade no están del todo claras, pero se puede confirmar que todavía incorpora una pantalla táctil multitouch de 7 pulgadas, y un teclado adaptativo, que puede cambiar para ajustarse a diferentes entornos o modos de juego.
En la “demostración” ofrecida por el fabricante en forma de video, podemos ver funcionando sin ninguna aparente dificultad, títulos como Left4Dead 2 o Starcraft 2 que no son precisamente el pináculo de la optimización gráfica, además de otros juegos como Quake Live, WoW, AION, y algún Need For Speed. Según Intel, la potencia del Atom Z690 es más que suficiente para mover este tipo de juegos en un sistema portátil como Switchblade, ofreciendo hasta un 13% más de rendimiento que el modelo inmediatemente anterior, el Intel Atom Z670, incluido actualmente en tablets como la Fujitsu Lifebook TH40/D.
Cifras, RAM, velocidad, puertos, ¿Un misterio?
No se conocen detalles de la GPU que será capaz de mover los juegos y aplicaciones exigentes de las que presume Razer, y se hace difícil pensar que un chip integrado de Intel pueda conseguirlo, al menos con soltura, aunque si bien hasta ahora no hay una lista de componentes completa, los datos sobre este curioso artefacto de Razer no son un completo misterio. Lo que se sabe hasta el momento, además de la CPU proporcionada por Intel, es lo que se pudo sacar en claro durante el CES 2011. En aquel momento, el Razer Switchblade se presentaba con estas características:
S.O: Windows 7 con interfaz personalizada de Razer
Pantalla de 7 pulgadas multitouch
Webcam
SSD 128GB
Conectividad Wi-Fi y modem 3G
Salida Mini-HDMI
Puertos USB 2.0
Batería de alta capacidad. Entre 4 y 6 horas de uso intensivo.
Durante el evento de ayer, Razer volvió a insistir en que este dispositivo es todavía un “concepto”, y no se ha atrevido a dar una fecha aproximada de lanzamiento, ni mucho menos un precio, pero conociendo a esta compañía, es de esperar que volvamos a saber de Switchblade en los próximos meses. Solo espero que este no se pierda en el vacío, junto a la interminable lista de gadgets anunciados-y-nunca-lanzados, porque lo cierto es que como plataforma móvil “independiente” de juegos no podría tener un mejor aspecto.