Responsables de la reconstrucción y conservación de la zona arqueológica que era utilizada como oratorio y templo de sacrificio a Tláloc “Dios de la lluvia”, por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informaron de los trabajos de rescate de muros del acceso principal y del hallazgo de 150 piezas prehispánicas.
La zona arqueológica que se encuentra enclavada a 4 mil 120 metros de altura sobre el nivel del mar en la Sierra Nevada, entre Río Frío y Texcoco, representa el templo prehispánico con características distintas a cualquiera, es considerada la obra más grande con 4 mil 600 metros de extensión y la más antigua edificada a esa altura del planeta.
Víctor Arribalzaga Tobón, arqueólogo del INAH responsable del proyecto aseguró que luego que el ayuntamiento de Texcoco y la diputación aportaron tres millones de pesos se pudo reactivar el rescate del templo. Hace tres meses sobre el camino principal de acceso a este centro ceremonial, sólo se veía un montón de piedras de lo que era el santuario.
Actualmente la zona cuenta con una estructura principal, de forma de adoratorio cuadrangular; mide 60 por 50 metros, y desde su base e inicia en una calzada de 150 metros de largo por 7 metros de lado a lado, que cumplía la función de recibir las peregrinaciones que acudían a este templo.
Abarca un perímetro de más de 4 mil metros cuadrados, y se presume que fue construida hace poco más de mil años y a la altura que se encuentra, hacen de esta zona la más antigua y extensa del mundo a ese nivel de montaña.
La presidenta municipal Delfina Gómez Álvarez consideró importante aplicar recursos públicos, en cultura, educación y deporte, sobre todo para que los niños y jóvenes no pierdan su identidad.
El acceso a Monte Tláloc, era complejo por los caminos que no se encontraban en condiciones adecuadas. “exhortó a los texcocanos, a visitar las zonas arqueológicas a conocer el patrimonio cultural.
La alcaldesa Delfina Gómez Álvarez y el legislador mexiquense, Higinio Martínez Miranda coincidieron en impulsar el rescate de las zonas arqueológicas del municipio, y desarrollarlas como un polo turístico para detonar la economía de los pobladores de la región. Y de otras zonas arqueológicas como de San Luis Huexotla, del Cerrito de los Melones, de Tzcutzinco, donde se encuentran “Los Baños de Nezahualcóyotl”.
Iniciaron los trabajos con unas 80 persona y en estos últimos meses se avanzó lo que más se pudo en su rescate. En febrero se tenía un avance de sólo el 10 por ciento”. Y hace unos 20 meses se llegó a considerar concluir el rescate en 20 años por las condiciones de la montaña y la carencia de recursos.
“Las bardas laterales del acceso principal ya fueron reconstruidas con la misma piedra volcánica derribada en 1530. Pero esperan contar con recursos para no dejar de explorar esa zona arqueológica.
“El Monte Tláloc es un gigantesco oráculo ceremonial en plenas funciones durante el imperio Azteca, es considerado como el lugar sagrado donde se reunían una vez al año los personajes más importantes de los señoríos aztecas, texcocanos y de Tlacopan (la Triple Alianza) para los rituales de fertilidad”
“Hay datos suficientes para saber cómo era ese templo prehispánico, en su momento representó la osadía de sobrevivir el holocausto de la Conquista de México, hasta el año de 1539, cuando fray de Zumárraga ordenó su destrucción y a partir de cómo quedó, iniciamos la restauración y conservación”, expresó.
Detalló que el recinto-fortaleza de Monte Tláloc a 4 mil 120 metros sobre el nivel del mar sobrepasa a “Tiwanaku” el sitio fundamental del mundo precolombino Andino, que está situado a 3 mil 880 msnm, cerca del Lago Titicaca, en el altiplano boliviano.
“Sin olvidar a Chavin de Huantar en la provincia de Huantar, Perú, a una altura de 3 177 msnm la segunda más alta de Sudamérica. La zona de la muralla de “Hadrians Wall” en Inglaterra y las esculturas de los Dioses Greco- Romanos construidos por “Antiuchus” en el sitio Nermud Dagh, en Turquía, sobre las altas montañas de Taurus, Anatolia, todos estos sitios por debajo de la altitud del Monte Tláloc. Tan sólo sobrepasan al Monte Tláloc entierros rituales INCAS encontrados en los Andes, los cuales son sitios sin arquitectura masiva”, resaltó.
