El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó hoy la nominación del empresario restaurantero Andy Puzder, constante crítico de las protecciones laborales del gobierno de Barack Obama, como su secretario del Trabajo.
Director ejecutivo del conglomerado CKE Restaurants Holdings, que incluye la cadena de hamburguesas Carl´s Jr, Puzder ha sido también un activo crítico de las regulaciones a las empresas y del sistema de seguros de salud creado por Obama.
El empresario se opone además a un aumento al salario mínimo superior a nueve dólares por hora, en tanto que la mayor parte de los demócratas respaldan un incremento de hasta 15 dólares por hora. El salario mínimo actual a nivel nacional es de 7.25 dólares por hora.
“Andy peleará para que los trabajadores estadunidenses trabajen en ambientes más seguros y sean más prósperos al hacer cumplir estándares laborales de seguridad justos, y al garantizar que los trabajadores reciban los beneficios que merecen”, afirmó Trump.
En un comunicado, Trump añadió que Puzder ayudará a los pequeños negocios a mantenerse operando, al eliminar “las cargas de regulaciones innecesarias que están deteniendo el crecimiento del empleo y suprimiendo salarios”.
Puzder, de 66 años de edad, expresó que coincide con Trump al pensar que “las correctas políticas de gobierno pueden resultar en más empleos y mejores salarios para los trabajadores estadunidenses”.
Deborah Axt, codirectora ejecutiva del organismo civil “Se Hace Camino Nueva York”, dijo que las cadenas de comida rápida en Estados Unidos constituyen una industria que se ha caracterizado por su “extendida desigualdad, explotación y robos de salarios”.
“No existe otra interpretación posible sobre esta decisión más que el presidente electo Trump está mostrando su profundo desdén por el pueblo trabajador de este país y que se está riendo en nuestras caras”, destacó Axt.
Por su parte, la legisladora demócrata del estado de Connecticut, Rosa DeLauro, expresó que la nominación de Puzder, quien debe ser ratificado por el Senado como cada miembro del gabinete propuesto por Trump, es como poner “el zorro en el gallinero”.
“Su nominación representa el mayor ataque a los trabajadores que hemos visto en una generación”, declaró DeLauro al diario The Wall Street Journal.