Mediante su blog el candidato Eruviel Ávila escribe lo siguiente:
Cumplir quince años, mejor dicho, celebrar su fiesta de quince años, es un sueño para toda jovencita mexiquense.
Pues hace unos días, en nuestra campaña para Gobernador del Estado de México, tuve el privilegio de participar en el cumplimiento de ese sueño con más de cien chavas de Chapultepec y otros municipios vecinos. Fue una celebración muy bonita.
Me tocó ser el padrino de todas. Algunas de ellas estaban por cumplir años, otras lo acababan de hacer y hay que decir que incluso había algunas que ya tenían un par de añitos más, pero sus familias nunca pudieron hacerles realidad el sueño por falta de recursos económicos. Así que me sentí orgulloso de poner mi granito de arena para que este sueño se realizara.
Como me decía alguna de mis ahijadas: “una quinceañera sueña con su fiesta, su vestido, sus amigos, pastel, regalos, vals, muchas cosas…” Pues ese día tuvimos todo eso y más. Fue una fiesta sencilla pero no faltó un grupo juvenil para amenizar la cosa; cada una fue acompañada por sus familiares y amigos, les dimos un pequeño presente, bailamos el vals, no faltó el pastel y… ¡hasta me hicieron darle la mordida!
Yo tengo dos hijas. Para ellas, para mis ahijadas y para todas las chavas mexiquenses quiero una vida sana, que sean profesionistas, una vida de bien. Las mujeres no sólo merecen las oportunidades de superación, tienen el derecho a ellas. Afortunadamente, están quedando atrás en nuestro estado los días en que a la mujer se le limitaba, se le coartaban sus posibilidades de desarrollo, de crecimiento profesional, de superación personal. Ellas tienen el derecho de pensar en grande.
Por eso, al darles mi mensaje como padrino les hablé no sólo de mis buenos deseos, sino de todos los compromisos que estoy impulsando para que los jóvenes mexiquenses tengan mejores oportunidades de estudio, de diversión sana y de empleo.
Por ejemplo les platiqué de que haremos que la prepa sea obligatoria, crearemos veinte universidades en todo el estado, construiremos centros deportivos para el esparcimiento social y también unos de alto rendimiento. También hablé de las oportunidades que impulsaremos para que las empresas den el chance a los jóvenes en su primer empleo, no se vale que les pidan experiencia al llegar a solicitarlo y no les permitan adquirirla trabajando. También impulsaremos los microcréditos para que las que quieran puedan poner un negocito. Muchas acciones como estas nos ayudarán a ofrecerles un mejor futuro a nuestras jóvenes.
Un padrino tiene la obligación de velar por sus ahijadas. Así que por ellas y por todas las jóvenes mexiquenses quiero pensar en grande. Sí se puede.