El Fondo Monetario Internacional (FMI) expresó hoy su solidaridad con Nepal por el sismo de este sábado, que causó más de mil 800 muertos, y anunció el envío de ayuda para la reconstrucción y los damnificados.
“Quiero expresar mis más profundas condolencias al gobierno y al pueblo de Nepal por la pérdida de vidas y la devastación causada por el terremoto”, declaró Christine Lagarde, directora del FMI.
Informó que un equipo de colaboradores se prepara para visitar el país asiático, ayudar al gobierno a evaluar la situación y determinar el monto de la ayuda financiera que será requerida.
“Estamos coordinando de forma estrecha con representantes del Banco Mundial (BM) y otras agencias para apoyar en este desastre natural y la mejor forma en que podamos hacerlo”.
La cifra de víctimas por el terremoto de 7.8 grados que sacudió a Nepal se ubicaba la noche del sábado en mil 400 muertos y 700 heridos, pero continuaba en aumento conforme avanzaban los trabajos de rescate.
SE HAN CONTABILIZADO MÁS DE MIL 800 MUERTOS
El número de personas fallecidas a causa del sismo de 7.8 grados Richter que sacudió el sábado a Nepal suma ya mil 805, mientras el de heridos ascendió a cuatro mil 718, informó la mañana de hoy domingo el Ministerio nepalí del Interior.
En su más reciente actualización sobre los daños ocasionados por el terremoto, el gobierno de Nepal indicó que equipos de rescate y los propios ciudadanos continúan la remoción de escombros en busca de sobrevivientes en las cientos de construcciones que se vinieron abajo.
El gobierno declaró estado de emergencia debido al más intenso sismo en el país en 80 años, registrado el sábado a las 11:56 horas locales (06:11 GMT) con epicentro 80 kilómetros al este de la ciudad de Pokhara.
Al amanecer este domingo las labores de rescate pudieron continuar y reforzarse, por lo que las autoridades creen que el número de víctimas continuará aumentando conforme avancen las horas.
En tanto, gobiernos de otros países y organismos internacionales alistan el envío de ayuda humanitaria y coordinan su recepción con autoridades nepalíes, que reportan una extensa devastación en gran número de ciudades y poblaciones.
El sismo provocó el colapso de cientos de edificios, casas, monasterios e infraestructura, así como la interrupción de los servicios de comunicación telefónica, agua y luz, además de enormes grietas en las carreteras.
Destruyó asimismo varias construcciones históricas como la Torre Dharahara, edificada en 1832, de 60 metros de altura y con un balcón abierto a los visitantes durante los últimos 10 años, así como antiguos templos hindúes construidos con madera.
El movimiento, que también alcanzó a India, Bangladesh y China, provocó una avalancha en el Monte Everest, donde se reporta la muerte de 18 personas.
Nepal, de 28 millones de habitantes y localizado entre India y China, tiene una larga historia de desastres naturales, el peor en 1934 cuando un terremoto causó la muerte de más de ocho mil 500 personas.