La salud de Selena Gomez no mejora. Después de ser ingresada el pasado jueves por naúseas y dolores de cabeza, el sábado la joven acudió de nuevo al hospital. Por el momento no se sabe qué le ocurre, aunque le están realizando numerosas pruebas de tensión sanguínea.
Selena Gomez dio un gran susto el pasado jueves, cuando tuvo que ser ingresada de urgencia aquejada de naúseas y dolores de cabeza. Y parece que su situación no mejora: el sábado tuvo que regresar al hospital.
La discreción de su entorno hizo que no se supiera que le habían dado el alta, por lo que verla entrar de nuevo al hospital el sábado sorprendió mucho y aumentó las dudas sobre su estado de salud.
Y es que cada medio apunta a una afección distinta. Mientras que US Weekly afirma que sufrió una intoxicación alimentaria unida al agotamiento, en TMZ recogen que le están vigilando con atención la tensión sanguínea. Lo que sí está descartado es que la joven esté embarazada y esto sean molestias derivadas de la gestación.
Por si fuera poca tanta confusión, las fotografías que se están difundiendo de la joven regresando al hospital el sábado son poco alentadoras. Vestida con un chándal y con semblante triste y agotado, queda claro que Selena no atraviesa un buen momento.
