El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, confirmó este miércoles que sostuvo una conversación telefónica con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hace aproximadamente diez días. Según el mandatario venezolano, el diálogo se desarrolló en un tono “respetuoso y cordial”, marcando el primer contacto directo entre ambos gobiernos después de años de tensiones diplomáticas.
Maduro señaló que está dispuesto a avanzar hacia una relación “Estado a Estado” y “país a país”, si este intercambio representa una oportunidad para retomar el diálogo bilateral. “Si esta llamada abre caminos de respeto y entendimiento, bienvenida sea la diplomacia”, declaró durante una conferencia en el Palacio de Miraflores.
El reconocimiento de este acercamiento ocurre luego de que Trump confirmara brevemente haber hablado con Maduro, sin ofrecer mayores detalles. Hasta el momento, ninguno de los dos gobiernos ha revelado el contenido de la conversación, y no hay indicios oficiales de acuerdos concretos relacionados con sanciones, comercio o temas migratorios.
La revelación de la llamada llega en un contexto de tensión regional, tras recientes denuncias de Caracas sobre operaciones militares externas y amenazas a su soberanía. Analistas consideran que este contacto, aunque limitado, podría abrir un canal diplomático que parecía completamente cerrado desde 2019.
Sin embargo, especialistas advierten que no debe interpretarse como un cambio inmediato en la relación entre Washington y Caracas. “Es un gesto, no una negociación”, señalan, subrayando que las diferencias políticas, económicas y de derechos humanos siguen siendo profundas.
Por ahora, la llamada se mantiene como un primer acercamiento inesperado entre dos gobiernos históricamente enfrentados, cuyo desarrollo po

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