
Veracruz, Ver.- África es un continente formado por 54 países, cada uno con una multiplicidad de expresiones culturales que en el plano de la danza y la música han impactado tanto a la sociedad europea como latinoamericana, cuyas manifestaciones se han enriquecido a partir de los procesos de intercambio históricos, subrayó el académico Zac Diouf, durante su participación en el Festival Afrocaribeño 2011, con la charla “África y su legado”, en la que se refirió de manera particular a la región oeste del mencionado continente.
Malí, Guinea, Senegal y Costa de Marfil, ubicados en el oeste de África, cuentan con expresiones musicales que de acuerdo con el ponente, generaron lo que ahora se conoce como blues en los Estados Unidos, que en sus orígenes se identificaba como canto de los esclavos. En sus primeras formas, este género musical era ejecutado por un cantante, un guitarrista y tambores, como una forma de comunicación local. Para los indígenas del oeste de África es una música cotidiana.
En cuanto a la difusión de la danza, el especialista señaló que al hablar de danzas africanas es importante definir la región de las mismas, la época de su nacimiento y los ritos o procesos en los que se ejecuta, pues en África en un sólo país pueden convivir hasta 20 etnias diferentes, cuyas expresiones culturales presentan una diversidad de variantes.
Zac Diouf es director de la Compañía de danza Diamano Coura de África occidental, organización cultural sin fines de lucro dedicada a la preservación, la educación y el reconocimiento de la música tradicional de África occidental. Desde su creación en 1975, Diamano Coura cumple con su misión a través de la realización de talleres permanentes, actuaciones, programas para la juventud y conferencias, además de programas de asociación creativa. La compañía busca mostrar la cultura de África occidental y compartir la música y danza específicamente, como una alternativa a la formación de las nuevas generaciones y preservar su pasado ancestral.
En esta misma jornada orientada a la reflexión en torno a la tercera raíz, el investigador Alfredo Delgado compartió el panel con la académica y especialista en este tema, Yolanda Juárez, para referirse a la afrodescendencia en Veracruz. Coincidieron en señalar que el tema implica la revisión de múltiples procesos históricos, ya que la presencia africana en México y particularmente en Veracruz, ha permeado muchos aspectos de la vida cotidiana.
Alfredo Delgado, cuyas aportaciones académicas le valieron la nominación a la Medalla Gonzalo Aguirre Beltrán en este año, subrayó que al hablar de afrodescendientes debemos tener presentes distintas migraciones. En una primera parte podríamos englobar a los afrodescendientes de manera general en la época colonial, que fue muy importante porque es entonces cuando se crea la base de lo que ahora conocemos como cultura afromestiza de Veracruz.
Ya en el siglo XIX la migración afrocaribeña se caracteriza por la integración de la población a las haciendas, plantaciones, a los cortes de caña en los ingenios, al ferrocarril y a los trabajos en los pozos petroleros. Una tercera migración se sitúa en los años 30?s y 40?s, con la llegada de los músicos y deportistas que se integran al trabajo en la radio, por ejemplo.
Por ello, la definición de los afrodescendientes depende del periodo histórico y de las comunidades a las que hagamos referencia, puntualizó el investigador. Como ejemplo se refirió a Tamiahua y poblaciones en las que la cultura afromestiza colonial está muy presente “permeando la cosmovisión indígena; sin embargo, en lugares como el Puerto de Veracruz, esta presencia se diluye en gran medida, al contrario de la corriente afrocaribeña que permanece en elementos como el danzón y el carnaval, que remiten más hacia el Caribe.
La importancia de mantener foros de reflexión como el que se genera alrededor del Festival Afrocaribeño, es que permite generar una conciencia sobre el pasado, que contribuya a reconocernos en nuestros orígenes comunes; para ello es necesario también, afirmaron los ponentes, la colaboración de los medios de comunicación, que han priorizado la presencia de Cuba y el caribe, soslayando la presencia protagónica del legado africano en la conformación de las expresiones culturales que caracterizan a la referida región geográfica.