México.- Organizaciones integradas al Congreso del Trabajo (CT) se manifestaron en el Zócalo de la Ciudad de México para exigir al Gobierno federal y a quien en el futuro asuma el poder, frenar la violencia, la cual mantiene a los habitantes del país en una situación critica, similar a la que viven por los bajos salarios, la carencia de empleo y la miseria.
Al conmemorar el Día Internacional del Trabajo, a nombre de las 39 organizaciones que conforman el CT, el vicepresidente de éste, Ramón Humberto Ojeda Silva; así como Reyes Soberanes, de la Confederación Obrero Revolucionaria (COR); José Becerril, del Sindicato Nacional de Trabajadores del Sector Financiero, y José Luis Mondragón, de la Federación Revolucionaria de Empleados y Trabajadores, resaltaron la necesidad de un cambio de rumbo de la política económica, social y laboral.
Humberto Ojeda subrayó que los trabajadores estarán atentos a que no quieran utilizarlos en el marco de las circunstancias electorales o los intereses políticos por parte de quienes «en muchas ocasiones actúan como mercenarios».
Ante miles de sindicalizados que comenzaron a llegar a la Plaza de la Constitución desde las 7:00 horas en un acto que concluyó a las 9:40, amenizado por artistas del Sindicato de la Música, Ojeda sostuvo:
«Aunado a la lucha por nuestro derechos laborales, desde esta tribuna manifestamos nuestra condena y hartazgo por la violencia y criminalidad que estamos viviendo en todo el país. Exigimos al gobierno, que es el responsable de restablecer el orden social, un replanteamiento de la estrategia hasta hoy seguida contra el crimen organizado».
Con esta premisa expusieron sendos pronunciamientos los otros tres líderes mencionados, uno de ellos, Reyes Soberanes resaltó que los trabajadores «no seremos cómplices de que México se siga construyendo con enorme desigualdad. Por ello demandamos al Congreso de la Unión que no se haga una reforma regresiva de la Ley Federal de Trabajo, por lo que llamamos a la unidad de todos los sindicatos para construir un país diferente con democracia, igualdad y justicia social».
Soberanes insistió en el rechazo de los asalariados al alza generalizada de precios y a los bajos ingresos que tienen, pues mientras los que más ganan pagan menos impuestos y mientras se incrementa la miseria y cada vez más mexicanos viven en extrema pobreza.
«Exigimos a quienes actualmente conducen y los que en el futuro les toque esta tarea, que México merece una clase trabajadora con mejores ingresos, que no frene el crecimiento de los salarios».
En tanto, José Becerril subrayó la necesidad de pugnar por la consolidación de la democracia, por una economía fuerte y justicia social, así como empleos suficientes, combate a la corrupción, a la inseguridad y a la impunidad.
Agencia El Universal