Jugadores que usan esteroides no deben estar en el Salón de la Fama: Jorge Posada

El pelotero puertorriqueño Jorge Posada, de los Yanquis de Nueva York, dijo hoy que desaprueba la posibilidad que jugadores que hayan sido mencionados con el uso de esteroides sean incluidos en el Salón de la Fama de las Grandes Ligas.

«No debe estar ninguno que haya usado esteroides», expresó Posada a periodistas luego de anunciar la bicicletada ‘Tour de Puerto Rico’ del próximo domingo por el área norte de la isla a beneficio de su fundación con niños diagnosticados con la condición de craneosinostosis.

Desde que los ex peloteros Mark McGwire y Sammy Sosa se fueron en un duelo en el 1998 por la marca de jonrones en una temporada que ostentaba Roger Maris, el tema del uso de los estimulantes ha pasado a que se denomine esa época como ‘la era de los esteroides’.

El récord de Maris era de 61 cuando los conectó en el 1961. McGwire la destrozó con 70. Luego, Barry Bonds la rompió con 73 en 2001.

No sólo McGwire ni Sosa han sido señalados, aunque el primero aceptó que los utilizó y el segundo no, sino otros como Bonds, Rafael Palmeiro, José Canseco, Juan ‘Igor’ González y Roger Clemens, han estado en la mira pública como principales usuarios de esteroides.

McGwire, Palmeiro y González ya han pasado la prueba de que sus señalamientos en el libro ‘Juiced’, de Canseco, en la que los mencionó como usuarios de esteroides, han caído en las votaciones de la Asociación Americana de Escritores de Béisbol (BBWAA) para entrar a la Sala de los Inmortales en Cooperstown, Nueva York.

Este año, McGwire, en su cuarta oportunidad para ingresar al Salón de la Fama, solo obtuvo un 23,7 por ciento de los votos. Palmeiro y González debutaron en las boletas. Palmeiro, quien dio positivo a esteroides mientras jugaba, recibió un 11 por ciento y González, un 5,2 siendo cinco el mínimo.

Los únicos peloteros que ingresaron el Salón de la Fama este año fueron el puertorriqueño Roberto Alomar y Bert Blyleven. Alomar lo logró en su segundo año de elegibilidad y Blyleven, en su decimocuarta oportunidad.

Posada, mientras tanto, tiene buenas probabilidades de ser escogido por ayudar a los Yanquis a ganar cuatro títulos en sus 17 años de carrera con el equipo como receptor regular. Sus números ofensivos, sin embargo, no son tan impresionantes como las de otros jugadores de su misma posición.

«Se me paran los pelos cada vez que me hablan del Salón de la Fama», señaló el jugador, de 39 años.

El veterano deportista aseguró que el ex pelotero boricua Bernie Williams será seleccionado como otro «inmortal» del béisbol porque «le dio la oportunidad a los latinos» jugar con los Yanquis.

Posada, por otra parte, aceptó que no le agradó mucho la idea de que los Yanquis le hayan dado la tarea de ser su nuevo bateador designado debido a la adquisición de nuevos receptores, entre ellos, el joven Russell Martin.

«No me vino muy bien, pero ellos están cuidando mucho de mí porque creo que de esa manera, puedo alargar mucho más mi carrera. Tengo que buscar una manera o rutina para mantenerme en el juego estando en el ‘dugout’. Quisiera retirarme como un Yanqui», abundó.