Especialistas de organizaciones médicas de México, Estados Unidos y otros países, emprenderán este año una intensa campaña nacional, a fin de demostrar que únicamente legislaciones como la Ley General para el Control de Consumo de Tabaco, promulgada durante la administración que encabeza el gobernador Andrés Granier Melo, protegen realmente a la población.
Dicha campaña obtuvo una aceptación entusiasta de parte del jefe del Ejecutivo local, de modo que para formalizarla mediante un próximo acuerdo, se organizará una visita de directivos de la Fundación Iniciativa Bloomberg para principios de febrero, informó la representante de la Oficina Nacional de Control de Tabaco, del Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic), Marcela Madrazo Reynoso.
En ese sentido, la funcionaria federal expresó su reconocimiento al mandatario tabasqueño, no sólo por su inmediata aprobación a la próxima campaña, sino por el trabajo que las autoridades realizan diariamente tanto en las verificaciones que practican en edificios de los tres niveles de gobierno, en establecimientos y otros espacios públicos, sino a través de extensas campañas educativas y preventivas.
Durante la reunión que sostuvieron los visitantes con el mandatario, en la Quinta Grijalva, Madrazo Reynoso afirmó que Tabasco es la entidad federativa que más ha avanzado en materia de combate contra el tabaquismo y sus efectos. “Es, sin duda, el ejemplo a seguir”, reiteró.
Al encuentro, al que asistieron el coordinador regional de Iniciativa Bloomberg para la Reducción del Uso del Tabaco, de OPS/OMS, Nelson Atehortua, y el secretario de Salud estatal, Luis Felipe Graham Zapata, la funcionaria precisó que la ley de Tabasco es incluso más avanzada que la federal, “porque mientras la segunda todavía prevé zonas exclusivas para fumadores, con ciertas características, la primera no permite ese tipo de espacios en lugares cerrados”.
Es decir, la ley tabasqueña obedece muy bien las recomendaciones publicadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), toda vez que es la única forma de proteger realmente no sólo a las personas que no fuman, sino incluso a los fumadores, mencionó.
Por su parte, Nelson Atehortua, también reconoció los logros que ha obtenido Tabasco en sus políticas de salud pública. Para dicha campaña nacional “nosotros no escogimos a Tabasco, sino que Tabasco se destacó solo”, precisó el directivo en la reunión, en la que participaron los enviados de Campaign for Tabacco Free Kids, Marina Carter y Patricia Sosa.
Reafirmó que Tabasco es el estado mexicano que mejor resultado ha registrado en el combate al tabaquismo, y de allí que los organizadores de la campaña tienen el compromiso de conocer más a fondo, cómo le hicieron sus autoridades para alcanzar esos envidiables resultados y llevar sus experiencias a otras regiones del continente. “Vamos a tratar de que ese buen ejemplo que usted da, trascienda las fronteras”, expresó el directivo al gobernador.
A su vez, Andrés Granier comentó que aplicar la ley en Tabasco no fue una tarea fácil, toda vez que para conquistar los primeros resultados, las autoridades con la Secretaría de Salud a la cabeza, emprendieron vigorosas acciones en todos los frentes. Ahora la legislación camina muy bien, sostuvo.
Durante la reunión entre el jefe el Ejecutivo estatal y los visitantes, también se acordó que bajo la coordinación del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), se realizará una medición de nicotina en el medio ambiente, y esa será la base para demostrar que sólo con leyes como la local, se combate exitosamente el tabaquismo.
También en el encuentro, de principio se formalizó hacer un estudio de impacto epidemiológico para observar el comportamiento de la salud de los tabasqueños frente a enfermedades asociadas al tabaquismo, tales como los infartos vasculares y los padecimientos respiratorios.
Para ello, se trabajará junto con el Laboratorio de Salud Pública de esta entidad, mencionó el equipo de trabajo, el cual también integraron los representantes de World Lung Fundation, Jorge Alday y Claudia Cedillo; de The Union, Mirta Molinari y Heather Selin; de John Hopkins School of Public Health, Erika Tang; de la OPS-México, Carlos Gámez, así como del Departamento de Investigación sobre el Tabaco, Tonatiuh Barrientos.