La reina Isabel II dispersó en los últimos días la nube sobre su eventual abdicación o retiro al participar en sendos eventos públicos en Reino Unido y Francia.
La monarca, de 88 años de edad, inició la semana pasada celebrando 61 años de su coronación con un paseo en pony, el mismo día que el rey Juan Carlos de España anunció sorpresivamente su abdicación del trono en favor de su hijo Felipe, Príncipe de Asturias.
En ambos lados del Atlántico donde la reina Isabel es Jefa de Estado se descartó una eventual abdicación del trono.
“Hay algunas razones por las que creo que la reina nunca renunciará. El juramento durante su coronación es uno de ellos y, si bien la abdicación es casi rutina en Europa, no lo es en Gran Bretaña”, afirmó el presidente de la Liga Monarquista de Canadá, Robert Finch.
La reina Isabel es jefa de Estado en dieciséis países de la Mancomunidad de Naciones Commonwealth, incluido Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica.
Además, la monarca juramentó ante Dios que servirá hasta el día de su muerte a diferencia de Holanda y Noruega donde las ceremonias de coronación son seculares.
El carácter religioso de entronación de reyes y reinas británicos “es diferente de las instalaciones seculares de Europa continental. La reina hizo un compromiso de por vida”, aseguró la historiadora de la Universidad de Toronto, Carolyn Harris.
La última vez que un rey abdicó el trono en la historia reciente de Inglaterra fue el rey Eduardo VIII quien causó una crisis política en 1936 al pedirle matrimonio a la socialité estadunidense Wallis Simpson, cuyo estatus de divorciada no es aceptable en la Church of England.
La renuncia al trono trajo como consecuencia que su hermano Alberto, quien era tímido y tartamudo, se convirtiera en el monarca Jorge VI, tal y como fue representado en la película “El discurso del Rey”.
La reina además, sigue desempeñando una función política como quedó establecido este miércoles cuando dirigió el discurso anual a ambas Cámaras del Parlamento.
Como cada año, estuvo acompañada de su esposo Felipe, duque de Edimburgo, quien cumplirá 93 años el próximo 10 de junio.
La pareja real, que este año celebra 67 años de casados tiene conjuntamente 181 años, pero a pesar de su avanzada edad siguen asistiendo a visitas oficiales y la reina camina sin apoyo de nadie.
La reina y el duque efectuaron el´pasado 5 de junio una visita oficial de tres días a Francia, donde la monarca encabezó el homenaje a los soldados de la Mancomunidad de Naciones o Commonwealth que murieron en el desembarco de Normandía o Día “D”.
La popularidad de la reina Isabel de Inglaterra se hizo visible en Francia cuando fue recibida con un prolongado aplauso por líderes mundiales y monarcas de Bélgica, Noruega y Holanda cuando arribó a la ceremonia oficial del 70 aniversario del desembarco de Normandía, encabezado por el presidente de Francia, Francois Hollande.
La reina es vista como un pilar de las monarquías europeas por su edad y el número de años de servicio -este año cumple 61 años en el trono- además de que es la única soberana con vida que sirvió a su país durante la II Guerra Mundial, conduciendo camiones en el “Servicio Territorial Auxiliar” la rama de mujeres del ejército británico.
Sin embargo, la monarca ha recortado los viajes trasatlánticos desde 2013 cuando el Palacio de Buckingham puso a “revisión los vuelos de larga distancia” y poco a poco delega responsabilidades a su hijo Carlos, quien a sus 65 años de edad sigue en espera de convertirse en rey.
Y por primera vez en la Abadía de Westminster en mayo pasado, los asesores de la reina recomendaron que no subiera y bajara escaleras durante una ceremonia tradicional de los caballeros de la Orden de Bath que data de 1725.
Si la monarca sigue gozando de buena salud, el 11 de septiembre de 2015 superará en el trono a su tatarabuela, la reina Victoria, quien reinó 63 años y 217 días.