
El secretario federal de Seguridad Pública (SSP), Genaro García Luna, acudió al Congreso de la Unión, donde dio cuenta a diputados y senadores —quienes cuestionaron el combate al crimen organizado— que “el tema clave que habrá que atender y combatir es la protección oficial” a los delincuentes, quienes corrompen y así “infiltran la capacidad del Estado”.
García Luna presentó un escenario en el que el consumo de drogas se ha cuadruplicado, en el caso de mariguana, y ha ganado presencia la cocaína en los adictos mexicanos, así como las anfetaminas. Mencionó el saldo de detenciones de criminales, así como los decomisos de enervantes, dinero, armamento, vehículos y propiedades.
Ante este reporte, PRI, PRD, PVEM y PT criticaron el saldo de muertos, principalmente de civiles inocentes, y advirtieron a García Luna que ello, aunado al aumento de la violencia, es repudiado por la población, y resulta de un fracaso del gobierno federal, renuente a adoptar una política integral con propuestas diversas.
El presidente de la Primera Comisión de la Comisión Permanente, Heliodoro Díaz Escárrega (PRI), dijo que el combate al crimen organizado “es un intento fallido” del gobierno federal, y reprochó que el Ejecutivo federal sea “repelente” a las críticas, cuando lo que se necesita es acordar entre todos una política de Estado en contra de los delincuentes.
El secretario Genaro García Luna había dicho que entre los retos que se deben atender está “consolidar una política de Estado en seguridad pública”, toda vez que “se requiere que todos sumemos esfuerzos, en una línea institucional para combatir el crimen”.
El secretario afirmó que buscará fortalecer los cuerpos de policía estatal, mediante la coordinación del gobierno federal con los estados para darles mayor alcance a las policías.
Este objetivo “implica la homologación de procesos, sistemas y metodología para los estados”, y ello requiere “crear un órgano que ya está previsto en la ley, en la institución, que regule para el país la seguridad pública, con capacidad para fiscalizar, vigilar y garantizar la continuidad del desarrollo institucional de la policía”.
Señalamientos de partidos
Héctor Guevara (PRI) acusó que en su reporte García Luna no haya reconocido que en un año se intensificó la violencia, que hubo 15 mil 273 muertos en 2010 y que tan sólo en enero han ocurrido al menos 990 homicidios en enfrentamientos contra el crimen.
“Padece el país una etapa convulsa ascendente; la violencia no acaba y el ciudadano ha perdido la credibilidad, mientras que la crisis es mayor y con Felipe Calderón hay más decapitados que en las guillotinas del terror de la revolución francesa”.
Arturo García Portillo (PAN) abrió la defensa de la política contra el crimen y lamentó que la oposición al gobierno federal sea sorda y sólo critique y diga que todo está negro, cuando desde los años 80 grupos políticos protegieron a los delincuentes. La panista Paz Gutiérrez urgió a la oposición a asumir su responsabilidad, a aprobar la figura de Mando Único de Policías, y concluyó que “la estrategia de combate a los cárteles llegó para quedarse”.
Agencia El Universal