Mercedes Sosa…vigilia musical en recuerdo de quien no canta por cantar

A cinco años de su fallecimiento, la cantante Mercedes Sosa recibirá un homenaje de la fundación que lleva su nombre con una vigilia musical en la capital argentina y un recital en San Miguel de Tucumán.

La vigilia esta noche contará con la participación de su sobrino Claudio Sosa y la folclorista Mariana Carrizo, mientras que mañana en Tucumán estarán el cantautor argentino Víctor Heredia, el músico Alberto Rojo y del Ballet El Zafrero, entre otros, de acuerdo con la propia fundación y reportes de prensa difundidos en las redes sociales de la organización.

El folclor argentino trascendió gracias a Mercedes Sosa, quien absorbió la cultura de su país desde su lugar de nacimiento, la pequeña ciudad de San Miguel de Tucumán, el 9 de julio de 1935, según información del portal «mercedessosa.com.ar».

Su actitud por la música fue desde temprana edad, pero encontró durante su adolescencia el amor por el folclor argentino, la danza y las expresiones artísticas populares.

A los 15 años participó en un concurso de canto organizado por la estación radial de su ciudad natal LV12; oculta bajo el nombre de Gladys Osorio, la cantante triunfó en la justa y se le otorgó contrato por dos meses de actuación en la emisora.

De acuerdo con el portal, éste fue el trampolín que llevó a Sosa a convertirse en una de las voces más reconocidas en el ámbito musical, mismo que la convertiría en parte uno de los movimientos más importantes de la música folclórica argentina, conocido como «El Nuevo Cancionero».

Esta corriente surgió a partir de la crítica a la música moderna y modas pasajeras en el país sudamericano y de la acentuación de la vida cotidiana del hombre argentino en sus núcleos y sentimientos de alegría y tristeza.

Dentro de los representantes de este movimiento destacó Oscar Matus, quien a la postre sería esposo de Mercedes y quien la llevó a realizar su primera grabación de la que surgió el material «Canciones con fundamento».

El material independiente que realizó su esposo le abrió un gran panorama en el medio artístico, mas no en el pensamiento de los habitantes de ese país, pues fue hasta el Festival Nacional de Folklore de Cosquín en 1965, cuando obtuvo reconocimiento en todo el territorio.

Una de sus producciones más importantes la realizó en 1966 con «Yo no canto por cantar» con una docena de canciones de gran trascendencia como «Zamba para no morir», «Canción para mi América» y «Los inundados».

Durante su carrera destacó también por su lucha a favor de los Derechos Humanos, e incluso lo expuso con el disco «Hasta la victoria», donde colocó letras cargadas de fuerte contenido social y político.

A pesar de la violencia en Argentina durante la época de los setenta, «La Negra» continuó con sus presentaciones hasta que fue detenida en La Plata durante una de ellas y fue exiliada de su país en 1979, con la condición de que podría ingresar a éste, siempre que no cantara.

Con el regreso de la democracia, Sosa volvió a Argentina, pero realizó grandes giras por Europa, Estados Unidos y Brasil, para catapultar su disco «Mercedes Sosa ‘86», obras realizadas en compañía de Leopordo Federico y el grupo Markama.

La época de los noventa le redituó con el disco «Mercedes Sosa en vivo desde Europa» y con su participación en grandes recintos chilenos como Viña del Mar y el Estadio Chile. En 1992, se le declaró como «Ciudadana ilustre de la ciudad de Buenos Aires».

Sosa destacó por su canto popular, pero también incursionó en otros géneros como el rock y el pop, inclusive, fue nominada al Grammy como mejor interpretación pop femenina en el 2000.

Esta organización también le brindó el reconocimiento como mejor álbum folclórico por «Acústico» y «Corazón Libre», en 2003 y 2006; y por «Cantora, un viaje íntimo» en 2009.

El 4 de octubre de 2009, la voz femenina más importante de la música popular argentina, falleció en una clínica de Buenos Aires a causa de una enfermedad hepática.

INF./GRUPO FÓRMULA/NOTIMEX