La comunidad internacional acordó hoy acelerar durante los próximos cinco años la lucha contra el SIDA y llamó a acabar con la discriminación que sufren muchos de los grupos más vulnerables a la enfermedad.
Durante la jornada inaugural de una conferencia de alto nivel de la Asamblea General sobre el tema, los 193 Estados miembros de la ONU adoptaron una Declaración Política de 79 puntos que respalda una estrategia para redoblar de aquí a 2020 las inversiones y las actividades contra el SIDA.
Para ello incluye objetivos intermedios como reducir el número de nuevas infecciones de unos 2,1 millones en 2015 a menos de 500.000 en 2020 o rebajar las muertes relacionadas con el sida de 1,1 millones a menos de 500.000 en ese mismo plazo.
La meta final, incluida en la nueva agenda para el desarrollo sostenible, es acabar con la epidemia para 2030.
El texto aboga por potenciar la cooperación internacional ante un problema de salud que sigue representando una amenaza global y por no dejar a nadie atrás en el combate al mismo.
Al comentar el documento, el director ejecutivo del Programa Conjunto de la ONU sobre VIH SIDA (ONUSIDA), Michel Sidibé, reconoció las dificultades encontradas en la redacción del documento, negociado durante varios meses.
“Esta declaración política, sin dudas, nos ayudará a cerrarle una puerta y abrirle otra a la lucha para poner término al SIDA. Recuerdo que la Carta de la ONU empieza con tres poderosas palabras: Nosotros los Pueblos. Puedo manifestar que nosotros los pueblos podemos quebrar la trayectoria de la epidemia”, dijo.
Añadió que gracias a esos esfuerzos, por primera vez en la historia del VIH se puede afirmar que África ha llegado a un punto de inflexión donde hay un mayor número de personas con cuidados que los infectados.
El texto solicita al Secretario General fortalecer la cooperación entre los organismos del sistema de las Naciones Unidas, bajo la de ONUSIDA para promover la acción rápida y convoca a una reunión de Alto Nivel para examinar los progresos contraídos en la declaración.