El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, echó para atrás una norma aplicada desde mayo de 2016 por Barack Obama que garantizaba a los alumnos transexuales elegir en las escuelas públicas el baño del género con el que se sentían más identificados así como hacer respetar su identidad como persona LGBTTTI.
El fiscal del gobierno conservador de Donald Trump justificó que la medida decidida por Obama fue suspendida porque producía demasiada confusión a nivel local y no incluía “un análisis legal suficiente” sobre cómo esa iniciativa era coherente con los poderes que la Constitución otorga al Ejecutivo.
Esta medida respalda a los gobiernos de los estados republicanos que criticaron a Obama por “exceder su poder” al proclamar una norma, que aunque no tenía rango de ley, amagaba a las instituciones educativas con reducir sus fondos de origen federal si no la acataban.
En su comunicado, Sessions aseguró que el Departamento de Justicia “mantiene su compromiso” de proteger de la discriminación, la intimidación y el acoso a “todos los estudiantes”, incluidos aquellos que pertenecen a la comunidad lésbica, gay, bisexual y transexual (LGBT).
Esta medida, ahora sin efecto, había sido una respuesta en contra del acoso escolar que incrementaba en las escuelas estadounidenses.