Hace cinco años murió Jenni Rivera, tras caer su avioneta en Iturbide, Nuevo León después dar un concierto en la Arena Monterrey.
En la aeronave también viajaban su publirelacionista Arturo Rivera Ruiz, los pilotos Miguel Pérez Soto y Alessandro Torres Álvarez, el abogado Mario Macías Pacheco, el maquillista Jacob Yebale y el peinador Jorge Armando Sánchez «Gigi», quienes también perdieron la vida al momento del impacto y posterior incendio del aeroplano.
Muchas especulaciones surgieron en torno a la Diva, entre ellas que la había asesinado el narcotráfico o que simplemente fue un descuido de los pilotos mexicanos.
Sin embargo la Agencia Federal de Aviación de EU (FAA) en colaboración con la Dirección General de Aviación Civil mexicana, confirmaron que la causa del avionazo fue un tornillo suelto del elevador que sería como el volante de la avioneta, informó Tv y Novelas.
«Un tornillo que controla el elevador, que es como un volante del avión (que causa que suba y baje), tuvo un problema», dijo el abogado de las víctimas, Vance Owen.
Cabe señalar que la muerte de Rivera, incrementó sus ganancias de 25 mdd a 300 mdd, según El Universal, esta fortuna se amasó gracias a una película, dos series televisivas, varios libros entre ellos su biografía, así como álbumes en honor a la intérprete de «La Gran Señora».
Pese al sinfín de declaraciones y especulaciones sobre su muerte, miles de seguidores en México y Estados Unidos, aún siguen escuchando y honrando a su cantante favorita, la Diva de la Banda, Jenny Rivera.
inf./Grupo Fórmula
